Lo que para algunos, tal vez, ni siquiera comenzó siendo una salida profesional posible, se está convirtiendo en una vía cada vez más demandada y que ya se imparte en muchas universidades de nuestra geografía. Se trata del máster de profesor de secundaria y bachillerato, lo que antes se conocía como el Curso de Aptitud Pedagógica (CAP). Muchos jóvenes terminan sus estudios y, o bien porque no encuentran trabajo o bien porque el que consiguen es muy precario, se deciden por abrirse el campo profesional a través de la docencia. Y ésta puede ser una buena opción para muchos aunque tampoco conviene lanzarse a la desesperada a realizar unos estudios que, en el fondo, no nos despiertan ni un mínimo de ilusión o espíritu vocacional.
La principal razón de este auge en la demanda es que hay muchos licenciados o graduados que tienen cabida en este máster ya que cada especialidad tiene al menos diez titulaciones que dan acceso directo al máster. Por ejemplo, un farmacéutico puede impartir biología o matemáticas, un arquitecto puede acceder para ser profesor de tecnología o un licenciado en filosofía puede impartir también lengua castellana y literatura. Estas son solo algunas de las muchísimas posibilidades que hay para cada rama o asignatura.
Requisitos
- Lo que la mayoría de la universidades exigen es un nivel B2 en cualquier lengua extranjera.
- En caso de que el interesado no disponga de titulación universitaria, deberá demostrar sus competencias a través de una prueba de ingreso. Esta es una de las facilidades que se comienza a ofrecer dada también la cada vez mayor oferta. Quienes no tengan título oficial de inglés u otra lengua no de origen, también tienen la posibilidad de examinarse en la universidad y poder acreditar el nivel.
Por otra parte, las oposiciones pueden ser el siguiente paso si se quiere afianzar la profesión. Tras uno años sin convocatorias, parece que vuelve a retomarse la racha de convocar oposiciones cada año. Teniendo en cuenta el cambio del panorama político en muchas Comunidades Autónomas donde la enseñanza concertada está en tela de juicio, invertir varios años en prepararse unas oposiciones puede ser una buena elección.
No obstante, los centros privados son otra opción. Las propias universidades privadas, tienen convenios con colegios privados donde los alumnos van tres meses a realizar las prácticas. Este periodo puede ser la puerta que abra la oportunidad al empleo. Como en muchos otros casos, el periodo de prácticas son nuestra oportunidad para demostrar aptitudes y ganas de hacerlo bien además de, por supuesto, aprender al máximo.
