A un británico llamado Crisp se le ocurrió criticar en Facebook algunos productos de Apple, empresa para la que trabajaba. Estos mensajes llegaron a manos de su jefe, que lo despidió de manera fulminante. En el otro lado del mundo, Hashmat Stanekzai, policía afgano, publicó en su muro de Facebook el linchamiento de una mujer. Sus superiores lo descubrieron y también fue despedido. Mientras, en Texas, una joven llamada Cella se hizo una selfie que publicó en Twitter junto al texto «Mañana empiezo este trabajo de mierda». Su futuro jefe leyó el mensaje y Cella se quedó sin empleo antes de empezar.
Estos son solo tres casos de despidos provocados por mensajes que los usuarios lanzaron a las redes sociales y que leyeron las personas menos indicadas: sus jefes. La proliferación de nuevas redes sociales y la necesidad de compartirlo todo provoca que algunos mensajes que dijimos en el pasado (y olvidamos) nos vuelvan como un bumerang para golpearnos por sorpresa. En este post te explicaremos algunos trucos para repasar lo que has dicho en las principales redes sociales. Antes, sin embargo, empezaremos con un consejo básico: no publiques nada de los que te puedas arrepentir en un futuro.
Si estás buscando empleo o sobre todo si ya te encuentras en un proceso de selección, deberías tener bajo control los mensajes que lanzaste a la red, ya fuera a través de Facebook, Twitter o Instagram. Es muy probable que quien tenga que contratarte repase tu historial público, o que lo haga tu propio jefe. ¿Qué podemos hacer para saber qué presencia tenemos en redes sociales o cómo borramos mensajes de los que ahora nos arrepentimos?
Para empezar, si eres usuario de Facebook debes saber que todo lo que escribas, postees o comentes se puede borrar o editar. Con todo, te recomendamos que actives la máxima privacidad para tus publicaciones. En la propia página de Facebook, encontrarás los pasos a seguir para impedir que tu información llegue a personas que no conoces. Los usuarios de Google+ podéis hacer exactamente lo mismo. Aquí encontraréis más información. Y si tienes compañeros de trabajo en estas dos redes, vigila qué dices de tu empresa.
En el caso de Twitter, la propia aplicación te permite descargar tu historial de tweets en un documento csv (un especie de excel) por el que podrás navegar o buscar palabras clave para saber si has dicho algo que no tocaba de alguien. También puedes borrar los tweets desde la propia aplicación, aunque si lo que prefieres es borrar todos tus tweets de golpe puedes usar Tweet Deleter o Tweet Eraser, que te permite eliminarlos selectivamente a través de palabras claves.
Si lo que te da apuro es una foto que colgaste en Instagram, tranquilo; también puedes eliminarla. A través de la aplicación solo puedes borrar una a una (a no ser que elimines el perfil completo), pero atención, aunque borres la foto de la aplicación, ésta seguirá apareciendo en las otras redes donde la compartiste (por ejemplo, Facebook o Twitter).
Para los usuarios de iOS existe una aplicación (todavía en fase beta) que les pone las cosas mucho más fáciles. Se trata de Clear, una app que se conecta a tus redes sociales (de momento solo a Facebook, Twitter e Instagram) y escudriña en todas tus publicaciones mensajes malsonantes o polémicos que hayas podido emitir.
Y si eres community manager y quieres monitorizar todo lo que se dice de tu empresa o marca, la aplicación que te recomendamos es Brandchat. Con ella podrás acceder a la información relevante a tiempo real y saber qué se está diciendo de tu empresa en diferentes redes sociales como Twitter, Facebook, Linkedin, Google Plus, Instagram, Youtube, así como en blogs, foros y sitios de noticias.
Moraleja: tanto si estás buscando trabajo como si estás trabajando para una empresa, sé cuidadoso con lo que dices en las redes sociales. Las redes sociales las carga el diablo.
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Hola Daniel,
Muchas gracias por la mención y recomendación.
Un saludo :-)
Daniel interesante articulo y gracias por recomendar www.brandchats.com
¡Un placer Jordi!