El Programa Interuniverstario de la Experiencia de Castilla y León UPSA ha organizado, hoy en el Aula Magna, el Encuentro de alumnos de primer curso de las sedes de Burgos, Salamanca y Valladolid. El vicerrector de Relaciones Institucionales y Comunidad Universitaria, Jacinto Núñez Regodón, ha presidido el acto, acompañado por el coordinador de la sede de Burgos UPSA, Isidro Revilla Barriuso, y el coordinador de la sede de Valladolid UPSA, Alexis González de León. En el acto académico, al que han asistido 130 alumnos, participaron también los delegados de los cursos. El acto académico del Programa Interuniversitario de la Experiencia de la UPSA se ha organizado con el objetivo de que los alumnos procedentes de las distintas sedes conozcan las instalaciones y a los alumnos de la Universidad a la que pertenecen.
El vicerrector de Relaciones Institucionales y Comunidad Universitaria, Jacinto Núñez Regodón, ha dado la bienvenida a los alumnos de las distintas sedes y ha recordado a Adoración Holgado, directora del Programa recientemente fallecida «a veces hay ausencias que son más fuertes que la presencia. Soy consciente de que queremos celebrar este acto masivo de la Experiencia sin su presencia física, convencido de que esta no termina, porque continúa de otra forma. Cuando la ausencia es muy sentida y dolida, la nostalgia termina con forma de esperanza y eso pertenece de lleno al corazón de la fe cristiana». El vicerrector también ha agradecido a la Junta de Castilla y León el esfuerzo realizado por la extensión del Programa a otras ciudades, así mismo agradeció la labor de la coordinadora, Mª Teresa Ramos Bernal, a los padres dominicos de Valladolid y a los padres salesianos de Burgos «por el apoyo institucional al Programa», y a los alumnos «reales protagonistas del Programa, por vuestra ilusión, ganas de aprender y motivación». En este sentido, se ha referido a la relación que hay entre saber y sabiduría «la vida académica de una universidad tiene muchos saberes, la experiencia, los años, son un buen vehículo para que el saber se vaya convirtiendo en sabiduría, porque el saber por saber suele valer poco». Núñez Regodón concluyó su intervención reconociendo la gran aportación del colectivo de alumnos de la Experiencia «porque el vehículo de todo eso es la sabiduría».
El delegado de primer curso de la sede de Burgos, Gonzalo Navarro Cuesta, ha afirmado que «estamos todos en el mismo barco con una edad que nos permite participar en la Universidad de la Experiencia y somos los afortunados que pueden participar en este programa».
Por su parte, el delegado de primer curso de la sede de Salamanca, Luis Guerra Cruz, ha destacado «que volver a la Universidad ha sido estimulante y aleccionador. Gracias a la Universidad se nos ha dado la capacidad de recordar y reforzar aquellos aprendizajes y facilitar a otros oportunidades, como las de aprender cuando no lo pudieron hacer». El delegado ha animado a todos sus compañeros a «no dejar pasar la oportunidad que nos brindan a nuestra edad y aprovechar el tiempo que con tanta ilusión ponen los profesores en sus clases». El delegado ha aprovechado la ocasión para solicitar más horas de enseñanza en alguna de las materias y animó a otras personas del entorno a participar en el Programa de la Experiencia. También recordó a la directora, Adoración Holgado, «ha dejado un vacío difícil de llenar y junto con la coordinadora, Mª Teresa Ramos Bernal, habían creado un binomio perfecto».
Por otro lado, el representante de primero de la sede de Valladolid, Arturo Díez San José, ha destacado «la paciencia de los coordinadores, agradecer el esfuerzo de los profesores y reconocer a los impulsores del programa y su compromiso para mantenerlo vivo».
El coordinador de la sede de Valladolid, Alexis González de León, se ha referido al paso del tiempo donde «uno se resiste a envejecer, a creer que todavía quedan fuerzas para todo, pero lo cierto es que las energías hay que seleccionarlas y un campo de motivación es el de aprender cosas nuevas, para eso nunca es tarde». El coordinador ha insistido que «no se nos enseña a perder, tampoco a envejecer y nada a morir, sin embargo estos tres elementos tienen algo en común: un camino de aprendizaje aún por explorar». El responsable se ha referido también al Principio de parsimonia de la Navaja de Okam según el cual: en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla suele ser la más probable «la idea que encierra más versimilutd es la simple y para perder, envejecer y morir lo más simple es dejarse ir», afirmó. Para González de León «hay que dedicarle tiempo para aquello a lo que nunca pude realizar y ofrecer mis días para aquello en lo que antes no prestaba atención, es una manera de poner salud a mi vida (…) Y la Universidad de la Experiencia te obliga a salir al encuentro con otros alumnos, a contactar cómo otros se plantean los años, te amplían conocimientos lejos de la soledad de nuestros hogares, también es un remedio saludable para esto», conluyó.
El coordinador de la sede de Burgos, Isidro Revilla Barriuso, se ha referido a los 22 años del Programa en la capital burgalesa «pasar de una a 27 sedes, de 46 alumnos el primer año que se cursó a los 1.100 alumnos que han pasado, ha sido un enriquecimiento con vida y experiencias». Revilla Barriuso ha realizado también un recuerdo a Adoración Holgado Sánchez «fue el alma de este programa desde el principio, cuando pocos creían. Ella fue quien hizo el diseño y la programación completa, con ilusión, trabajo y gran actividad. Se dedicó en alma y cuerpo. Fue la UPSA la pionera en España de la Universidad de mayores. Le dio la estructura adecuada, abierta siempre a nuevas ideas y supo adaptarse a los cambios del Programa (…) También fue creadora de intercambio con otros Programas de España y del extranjero y fue el alma de la creación de la Universidad de la Experiencia en otras sedes. Le deseamos lo mejor, Dios haya premiado su vida, su entrega e ilusión», concluyó.
Previamente al acto académico se celebró una Eucaristía en la Capilla de la Universidad.
