En las cuatro últimas décadas, la conciencia medioambiental en las empresas ha pasado de ser un elemento marginal a integrarse totalmente en su estrategia de negocio. Muchos factores han contribuido a ese salto cualitativo, entre ellos la formación especializada de profesionales en esta materia.
La Escuela de Organización Industrial (EOI) fue la primera escuela de negocios de España en impartir programas máster en medioambiente, sostenibilidad y energía. Desde 1976, se ha convertido en un referente en formación en estas disciplinas. Para conmemorar este 40 aniversario, EOI organizó el pasado 3 de junio la mesa redonda ‘Cuarenta años, diez experiencias en la gestión del medioambiente’.
El objetivo de este encuentro, moderado por Luis López-Cózar, socio fundador de Valora Medio Ambiente, era analizar la evolución de la gestión medioambiental en diferentes sectores industriales, así como las perspectivas de futuro. Para ello se contó con la visión de antiguos alumnos de EOI que hoy ocupan puestos de responsabilidad en empresas de primera magnitud: Jaime Martín Juez, director de Tecnología y Sostenibilidad de Repsol; Emilio Arce, director general de Acciona Facility Services; Ana Escribano, responsable de Depuración Madrid de FCC Aqualia; Nieves Cifuentes, jefa del Departamento de Medioambiente y Sostenibilidad de Gas Natural Fenosa Engineering; Almudena Rodríguez Beloso, directora de Responsabilidad Social Corporativa y Medio Ambiente en Accenture; Kepa Solaun, socio y director general de Factor CO2; Jesús Rubio, director técnico de Consultoría y Vigilancia Ambiental en Labaqua; Cristina Rey, consultora en RSC y Gestión Ambiental; y Santiago Muñoz, subdirector de Organización, Eficiencia y Sostenibilidad en Correos (Grupo SEPI).
Todos los ponentes coincidieron en destacar la evolución de las empresas españolas con respecto a sensibilidad medioambiental. “El medioambiente es hoy uno de los criterios de decisión fundamentales, ha pasado a ser parte de la estrategia empresarial”, aseguró Nieves Cifuentes. En este mismo sentido se manifestó Cristina Rey: “Antes la conciencia ambiental no era una prioridad para las empresas. Ahora mismo, ya no hablamos de una estrategia de responsabilidad ambiental, sino que la estrategia empresarial ya incorpora la responsabilidad ambiental en sí misma”.
Ana Escribano incidió en esta idea: “Cuando empecé en la profesión no había una concepción global de la gestión medioambiental, estaba todo muy compartimentado. Ahora mismo, las empresas tienen muy claro que sus procesos han de ser sostenibles y que hay que avanzar hacia la eficiencia y optimización energética de las instalaciones”.
Este avance ha impulsado la demanda de profesionales cada vez más especializados en las distintas áreas de la gestión medioambiental y las energías renovables, y también al revés, ya que estos perfiles han llevado a las organizaciones una nueva forma de trabajar. Según Jesús Rubio, “en veinte años hemos asistido a un cambio clarísimo. Ya existen puestos dedicados, que reportan directamente a la Dirección General. Ya no tienes que explicarle al cliente por qué hay que hacer tal o cual cosa”.
“Cuando yo empecé en el sector, había una enorme necesidad de profesionales en consultoría de medioambiente”, explicó Kepa Solaun. “Gracias a instituciones como EOI, el sector se ha profesionalizado muchísimo”. Para Almudena Rodríguez, “el hecho de que la RSC se haya ubicado en el corazón de la toma de decisiones de las organizaciones ha contribuido a que los profesionales del sector hayamos ganado peso específico”.
Todos los invitados resaltaron la importancia que tuvo su paso por EOI para su desarrollo profesional, así como la necesidad de continuar profundizando en la formación en este sector. “Los profesionales que salen de EOI son los mejores de España”, aseguró Jaime Martín Juez. “Los alumnos que ahora os estáis formando en gestión medioambiental trabajaréis en campos que ahora mismo no existen. El nivel de sofisticación que se os requerirá para asumir los retos que vienen es grande”.
“Es un hecho que EOI es cantera de talento para muchas empresas”, afirmó Emilio Arce, que destacó de su paso por EOI “la percepción de la gran diferencia que había entre lo que había visto en la universidad y la realidad que nos contaban aquí los profesores, que eran todos profesionales del sector”. Para Nieves Cifuentes, “EOI fue un referente fundamental. Me ofreció una red de contactos, me ayudó a superar el gap que suele haber entre formación y esfera laboral y a insertarme en ésta, ya que entré en Gas Natural con una beca gestionada por la escuela y he desarrollado allí toda mi carrera. Siempre que puedo seleccionar a gente para mi equipo, escojo a alumnos de EOI, porque sé que están preparados”.
