La Facultad de Educación y Escuelas Católicas de Castilla y León han organizado, esta mañana en el Auditorio S. Juan Pablo II, la VII Jornada sobre Intercambio de Buenas Prácticas Docentes para Infantil, Primaria, E.S.O., Bachillerato y F.P. En esta ocasión, las jornadas han versado sobre ‘La innovación como compromiso’. El acto de apertura ha sido presidido por el vicerrector de Investigación y Títulos, Pedro Sangro Colón, acompañado por el secretario autonómico de FERE-CECA Castilla y León, Leandro Roldán Maza; la vicedecana de la Facultad de Educación, Begoña Díaz Rincón, y la directora del Máster Universitario en Formación del Profesorado de Educación Secundaria y Bachillerato, FP y Enseñanza de Idiomas, Amparo Casado Melo.
El vicerrector de Investigación y Títulos, Pedro Sangro Colón, ha agradecido un año más la colaboración de Escuelas Católicas Castilla y León por organizar estas jornadas y ha destacado la importancia de la innovación en la educación. «Innovar es atreverse a pensar de otra manera, a utilizar el pensamiento lateral, a hacerse preguntas que no se hace nadie. Innovar es conectar elementos aparentemente disociados para crear nuevas formas de lógica», apuntó. Para el responsable, innovar implica moverse entre las fronteras de la tecnología y la cultura «en la era digital que nos obliga a dar tanta importancia tanto a los medios como a los mensajes». Para el vicerrector hay un elemento clave que ofrecer la innovación «ayuda a los demás en la mejora de sus vidas, con una educación últil, imprescindible en los procesos de aprendizaje de alumnos especiales, personas con capacidad limitada, jóvenes en riesgo de exclusión, enfermos, etc». Y significa «comunicar de forma efectiva y directa las experiencias de innovación», concluyó.
La directora del Máster Universitario en Formación del Profesorado, Amparo Casado Melo, ha aludido a las palabras de Agustín Blanco, director de la consultoría de Educación de la Universidad de San Andrés, quien destaca que «la innovación en el aula debe cubrir espectros muy amplios: desde el uso de las tecnologías, estrategias pedagógicas, la organización del espacio en el aula, la colaboración entre los docentes… el objetivo es lograr la experiencia del aula más efectiva para atrapar el interés de los alumnos, generar motivación y cumplir con los objetivos de aprendizaje». Para Casado Melo innovar es «confiar que todos pueden aprender más y mejor, tanto los alumnos como los docentes, sin formatos rígidos porque cada escuela es distinta y cada alumno es especial». «Nuestra tarea consiste en aplicar diferentes principios de forma creativa, con el fin de descubrir lo que funciona mejor en el aula. Es el único enfoque didáctico que realmente sirve», apuntó. Para la directora del posgrado «tener una buena escuela es un derecho, no puede ser una suerte». También se ha referido al trabajo de los docentes «no podemos seguir trabajando de forma individual que enferma y nos aleja de la escuela que queremos. Somos los docentes los que debemos trabajar en equipo como motores de cambio y de innovación», subrayó. Casado Melo se refirió a las características que deben tener las buenas prácticas docentes propuestas por la UNESCO «las buenas prácticas deben ser: innovadoras, efectivas, sostenibles y ejemplares», indicó y expresó la importancia de tener en cuenta el factor humano antes que los conocimientos. Para la directora las buenas prácticas docentes «deben suponer un proceso de cambio en los centros que incide en las formas de construcción de conocimiento», concluyó.
El secretario autonómico de la Federación Española de Religiosos de Enseñanza-Titulares de Centros Católicos en Castilla y León (FERE-CECA Castilla y León), Leandro Roldán Maza, ha destacado la satisfacción que desde hace siete años se mantiene con la UPSA. El secretario ha señalado que «uno de los objetivos clave de Escuelas Católicas de Castilla y León es la innovación, que necesariamente en el sistema educativo hacen y harán avanzar los cambios a los que se enfrenta la sociedad y que demanda una continua y reflexiva adecuación del sistema educativo a las emergentes demandas del aprendizaje». Ante un contexto escolar cada vez más independiente surge la exigencia de ir un paso más allá y dar respuestas organizativas didácticas y metodológicas que preparen a nuestro alumnado para ir adquiriendo la habilidad de desenvolverse en situaciones sometidas a un cambio constante». Innovar supone adaptar las clases a las nuevas formas en las que los alumnos aprenden e interactúan con los demás y requiere nuevas experiencias de aprendizaje dentro y fuera del aula». Para Roldán Maza es necesario innovar «porque es imprescindible educar en la diversidad y porque en la innovación descansa la evolución del sistema educativo y no en las leyes y porque es preciso mejorar la formación del profesorado», concluyó.
La conferencia inaugural ha correspondido a David Ortega Núñez y a la hermana Isabel Rojo Miguélez, directivos del Colegio Nuestra Señora de la Providencia de Palencia, quienes han destacado que «la innovación es algo que se debe establecer en el plan estratégico y en los programas de los colegios y priorizar frente a otros factores». Para Rojo Miguélez «la innovación no es algo estático y es necesario escuchar al entorno, la legislación, los alumnos y familiares y sus expectativas». El colegio contempla la innovación como proceso estratégico básico para desarrollar su plan de calidad dirigido tanto a las familias como a los alumnos. Los directivos desarrollaron en su intervención cuatro iniciativas en las que la innovación se hace prensente: el gabinete psicológico «con experiencias, talleres prácticos para trabajar los padres con los niños, como ‘matemágicas’ ‘el juego de mis manos’ ‘este niño es un terremoto’, etc. con pautas a las familias para dirigir positivamente». Y concluyeron explicando su intervención en la Escuela de padres y madres, el Ampa y el Club de senderismo.
Posteriormente, Cristina Mª Díaz y Sonia Hernández presentaron del plan de innovación ‘El blog en el aula’ del Colegio público Lazarillo de Tormes de Salamanca.
La jornada concluyó con la presentación de las propuestas de buenas prácticas docentes premiadas en esta ocasión. De las 27 propuestas presentadas este año la organización ha premiado: ‘Misión Clio 2000’ del Colegio Sagrado Corazón Hijas de Jesús, de Salamanca; ‘Sombras y luces’ del Colegio Maristas San José, de León y ‘La lavadora de las emociones’ del Colegio Sagrado Corazón la Anunciata, de Valladolid.
