Descubrir mi talón de aquiles

Si pudiese usted cambiar al menos un elemento de su personalidad con el fin de mejorar su vida, ¿qué cambiaría? ¿Qué barrera personal ha sido su desgracia en sus relaciones amorosas o en su carrera?
Si le preguntase a su cónyuge, a su ex cónyuge, a un amigo íntimo o a sus compañeros de trabajo cuál es su punto débil, ¿qué cree que le dirían?

Todos tenemos al menos un talón de Aquiles, una debilidad, una inseguridad o un punto vulnerable que nos echa repetidamente la zancadilla aunque no se trate de un estado patológico ni de un problema psíquico profundo. ¡Hasta se podría decir que las personas que insisten en que ellas no tienen ningún talón de Aquiles son, probablemente, aquellas cuyo talón de Aquiles es que creen que deben ser perfectas!

Pero este cuso no trata de la perfección.

Nos ocuparemos aquí de aquello que más atención requiere: las características que nos crean problemas sin cesar.

La mayoría de las personas no se someterán nunca a una psicoterapia, debido precisamente a su talón de Aquiles, pero lo cierto es que todo el mundo tiene algunas debilidades que interfieren en sus relaciones íntimas, en su trabajo y en su realización personal.

Descubrir nuestro talón de Aquiles puede representar el principio de la transformación de nuestras debilidades en impulsos positivos.

OBJETIVO

Descubrir nuestras debilidades para poder superarlas.