Existen muchas habilidades que creemos innatas pero que son posibles de desarrollar, saber hablar en público es una de ella. Por supuesto, no es sencilla de mejorar. Hablar para grandes públicos puede generarle a muchos un mal momento. No obstante, cuando lo dominamos, esta habilidad se vuelve una de las aptitudes más requeridas. Para mejorarla, cada vez es más frecuente recurrir a cursos de oratorio y expresión, pero, en definitiva, es una cuestión de actitud. Hoy veremos algunos consejos para hablar mejor ante el público.
Cómo hablar en público y no morir en el intento
Si eres de los que sufren miedo escénico cuando intentas comunicar algo antes una gran cantidad de personas, estos consejos están pensados para ti. Aquí tenemos una serie de técnicas que te ayudaran a romper la barrera de los nervios y dar un mejor discurso.
- Comprender tu discurso
Una parte fundamental de tu exposición será entender qué es lo que estás diciendo. No basta con memorizar el texto y repetirlo sin más. Para evitar errores, tartamudeos y laguas, deberás interiorizar tu exposición, para no perder el hilo de la exposición y transmitir mejor tus ideas.
De este modo, en lugar de memorizar el texto, puedes utilizar técnicas para aprenderlo: por ejemplo, repitiéndolo en voz alta para fijar ideas. Hablar en público se trata, en definitiva, de trasmitir de la mejor manera nuestras ideas para que el público lo comprenda.
- Emplear frases sencillas
Utilizar frases sencillas y breves es otro de los secretos de una buena oratoria. De este modo puedes captar la atención del público y no solo sus miradas, haciéndote más fácil coger soltura para proseguir con tu charla. Entre menos largas sean tus frases, menores serán las posibilidades de equivocarse.
- No tener miedo a gesticular
Al contrario, gesticular y expresarte mediante el lenguaje corporal y el movimiento enfatiza el mensaje que estás transmitiendo. Así conseguirás una expresión visual de lo que estás diciendo y ayudará a tu audiencia a entender el significado de tu exposición. Además, también nos ayuda a expresarnos mejor, pues el habla se sincroniza con el cuerpo siendo todo mucho más fácil.
Fuente: Escuela de Postgrado de Psicología y Psiquiatría
