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5 consejos para estudiar durante el fin de semana y aprovechar el tiempo

En teoría, el fin de semana es una oportunidad de oro para descansar de las obligaciones. Sin embargo, muchos estudiantes ven como la cantidad de trabajo se acumula y deben sacrificar el sábado o el domingo para avanzar faena. De hecho, cada vez hay más personas que combinan la formación con la vida laboral. A menudo, estos alumnos tienen que aprovechar los días festivos para preparar los trabajos y los exámenes. Por otra parte, los periodos de evaluaciones y entregas también son sinónimo de poco relax. Así pues, no es extraño que el hecho de no disfrutar de ningún día de desconexión genere sensaciones de estrés y desánimo

Para superar las emociones negativas, es fundamental contar con una buena organización. Un plan de estudios previamente establecido (con tiempo para el trabajo y tiempo para el ocio) nos permitirá a afrontar las tareas con la actitud adecuada. Además, conviene buscar un espacio que nos transmita un ambiente de concentración (biblioteca, sala de estudio, habitación personal, etc.) Eso sí, estudiar fuera de casa te ayudará a aislarte del móvil y las redes sociales de manera más efectiva. En este post, te presentamos 5 consejos para sobrevivir a un fin de semana de estudio intenso. Si los resultados no son los esperados, recuerda que los cursos de técnicas de estudio pueden ayudarte a mejorar tu rendimiento.  ¡Escoge el tuyo y saca más partido al tiempo!

5 ideas para sacar rendimiento a un fin de semana de estudio

  1. Aprovecha el viernes por la tarde. Cuando el viernes nos vamos de la universidad o del trabajo, surge la tentación de no hacer nada hasta el día siguiente. Si te espera un fin de semana duro, evita cambiar de chip y alarga un poco más la jornada laboral. Aprovecha para empezar suave, por ejemplo ordenando los apuntes o recopilando información.
  2. Márcate (y cumple) un horario. Debes plantear el sábado y el domingo como cualquier otro día de la semana. En consecuencia, tendrás que ponerte el despertador y decidir hasta qué hora quieres trabajar. Ser estricto con el horario garantiza una mayor concentración y un rendimiento más elevado. Sea como sea, no te olvides de los espacios de descanso.
  3. Establece tus objetivos por franjas horarias. Viernes tarde, sábado mañana, sábado tarde, domingo noche… Cada día tiene unas franjas horarias que te pueden ser útiles para delimitar tus objetivos. Decide qué volumen de trabajo vas a hacer en cada momento. En este sentido, es importante detectar en qué momento del día estás más activo.
  4. Busca una biblioteca que abra los domingos. Si estar en casa te desconcentra, busca un espacio de silencio. Las bibliotecas universitarias que abren los fines de semana son la solución ideal. ¡Hay más gente en la misma situación que tú!
  5. Reserva algunas horas para una actividad de ocio. Por suerte, hay una gran cantidad de actividades que nos ayudan a desconectar. Mientras que algunas personas prefieren un ocio relajado (como, por ejemplo, ir al cine), otras se decantan por soltar adrenalina haciendo deporte: ¡cuestión de gustos!

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