Es uno de los campos que poco a poco se instala como clave en el mundo contemporáneo. Por eso es importante aproximarse y comprender cómo funciona la arquitectura Big Data y cómo sus herramientas e interpretaciones son útiles dentro del universo empresarial y diversos campos de trabajo.
Pero primero… ¿Qué es el Big Data?
Big Data agrupa el volumen de datos generados diariamente por un negocio. Por tanto, su verdadero valor no es tanto la cantidad sino la interpretación que se haga de ellos. Por eso es importante reconocerlos como una muestra de información a estudiar para establecer nuevas estrategias y explorar escenarios que no hayan sido tratados.
Por lo general, el Big Data no está estructurado. De ahí que no sea sencillo ni interpretarlo ni gestionarlo de la mejor manera. Sin embargo, no es algo que no se pueda tratar, en especial con diversas tecnologías que se vienen desarrollando en los últimos tiempos.
¿Cómo es la arquitectura del Big Data?
Al ser un campo en el que la amplitud de información es notable, la arquitectura no es sencilla. De hecho, parte del éxito está en saber gestionarla, organizarla y darle un sentido según el interés de la empresa. Por tanto, se necesita un método.
Este debe definirse de acuerdo con mapas y esquemas en el que se establecen relaciones. Se realizan a través de softwares automatizados que facilitan tanto su disposición con el estudio. Sin embargo, todo parte de que la organización tenga claro el enfoque que quiere darle a toda esa información.
¿Cómo funciona el Big Data?
El Big Data se apoya en tres capas, análisis, gestión y almacenamiento. Cada una de estas instancias está relacionada. Por tanto, es necesario prestar atención a cada una para poder sacar la mayor cantidad de beneficios cuando se trata de Big Data.
Análisis
Una vez que se tienen los datos, lo siguiente es leerlos, estudiarlos y analizarlos para comprender qué tipo de información sugieren. En la actualidad se utilizan una serie de herramientas y procedimientos automatizados o que pueden ser ajustados según el interés de la organización.
Gestión
Esta capa, a su vez, se basa en tres más: integración, manejo y seguridad. Es acá cuando es necesario gestionar de manera eficiente toda la información con la que se cuenta, siendo consciente de que es recomendable lograr un manejo flexible que pueda ser adaptado a distintas circunstancias y necesidades.
Acá es importante tener en cuenta la calidad de los datos, establecer relaciones adecuadas, poder respaldarlos y almacenarlos de buena manera para evitar filtraciones o pérdidas que influyan en la lectura y la estrategias posteriores. Es un proceso de recopilación, manejo y protección de información.
Almacenamiento
Como se sugirió previamente, es un paso importante. En la actualidad se utilizan plataformas como Hadoop o MPP para soportar el Big Data de la mejor manera posible. Salvaguardar la información es clave porque permite revisar, tener relaciones más complejas y valiosas para dar con interpretaciones sólidas y adecuadas con los intereses de la organización.
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