Para todos es claro que con la situación que estamos enfrentando en la actualidad muchas cosas han cambiado en el mundo entero. Las cosas que solíamos hacer a diario eran muy diferentes hasta hace algunos meses que todo cambió. No cabe duda de que esta coyuntura nos ha afectado a todos de una u otra manera.
La forma en la que nos relacionamos con los demás es uno de los aspectos en los que más repercusión ha tenido la pandemia, ocasionando pérdidas de amistades, e inclusive, dando origen a muchas crisis de pareja. Las restricciones en los horarios y, en general, el confinamiento, son situaciones que han interferido directamente en nuestra vida social. Y aunque para muchos la restricción del contacto social no tiene mayor importancia, no cabe duda que el hecho de pasar tiempo con amigos es fundamental para descansar de nuestras rutinas laborales y desconectarse un poco de los asuntos diarios, incluida la vida familiar y en pareja.
No se puede negar que, por estos días, nuestro estado de ánimo ha sido uno de los más afectados con las medidas restrictivas, aumentando significativamente la presencia de estrés, ansiedad y mal humor, lo que se ve reflejado en un desgaste e inestabilidad emocional que afecta la convivencia en el hogar.
Si quieres conocer más a fondo de qué se trata toda esta situación, en el artículo de hoy te contamos todos los detalles acerca de las situaciones de crisis más comunes y cómo se pueden solucionar eficazmente. O si te interesa enfocar tu desarrollo profesional en este campo, la Escuela de Postgrado de Psicología y Psiquiatría tiene para ti este nuevo Máster en Terapia de Pareja+ Mediación Familiar, un programa de doble titulación con el que te convertirás en un experto en la materia.
Crisis de pareja, un problema muy común por estos días
La crisis de pareja es un concepto que engloba una serie de situaciones y conflictos que, a lo largo del tiempo, no se han resuelto. En este marco, cabe resaltar que, aunque todas las parejas no son iguales, existe una serie de situaciones y problemas comunes que se presentan en la mayoría de las relaciones y que, al identificarlos, es más fácil remediar los conflictos propios.
A continuación, te contamos cuáles son los conflictos más comunes:
- Problemas en la convivencia. Está claro que compartir el día a día con una persona no es un asunto sencillo. Los hábitos cotidianos y las tareas son elementos fundamentales en la rutina, por ello, es fundamental definir ciertas normas y reglas que permitan que la convivencia funcione adecuadamente. Aquí, las dos personas deben llegar a un acuerdo y encontrar un punto de equilibrio en la división de tareas.
- Indiferencia. Es usual que, con el tiempo, las personas comiencen a perder la ilusión de compartir tiempo juntos o sentir indiferencia con su pareja.
- Criticas. En este caso, la pareja deja de valorar las cosas positivas del otro y, en vez de eso, las críticas se convierten en algo muy común. Inclusive pueden empezar a surgir sentimientos de envidia.
- Falta de comunicación. Cuando se presenta esta situación, expresarse o escuchar a la pareja resulta un asunto complicado. Por ello, es importante aprender a manejar una comunicación asertiva para decir las cosas de manera respetuosa y cariñosa, sin herir los sentimientos del compañero.
- Desconfianza. La confianza empieza a desaparecer cuando la comunicación comienza a fallar, de ahí la importancia de aprender a decir las cosas adecuadamente y a tiempo.
- Pasado. El pasado es un tema que no nos deja avanzar si nos estancamos en él. Lo que se debe hacer es tomar las experiencias que nos sirvieron de aprendizaje y avanzar con lo que tenemos para entender que cada momento es único e irrepetible.
- Distancia en la intimidad. Cuando el estrés y las emociones negativas se apoderan de nosotros, comienza a construirse un muro que nos distancia de nuestra pareja, provocando menos expresiones de afecto y, por ende, las relaciones íntimas disminuyen.
Consejos para tener en cuenta
Antes que nada, es importante no relacionar siempre las crisis con algo negativo. Si lo vemos desde otra perspectiva, una situación de crisis puede traer cosas positivas y aprendizajes que serán de gran utilidad para el futuro. No obstante, aquí lo más importante es estar tranquilo consigo mismo para poder estar bien con los demás.
Así que, ten en cuenta los siguientes consejos:
- Trata de conocer a tu compañero para que puedas aceptar sus diferencias.
- Ante todo, el respeto.
- La sinceridad es un aspecto clave en cualquier relación, trata de expresar tus sentimientos y necesidades siempre.
- Procura entender las situaciones de tu pareja.
- Gestiona el tiempo que pasan juntos.
- Es importante que cada uno tenga su propio espacio.
- Que el apoyo sea mutuo en una relación es clave para que cada uno progrese como persona.
No siempre es fácil resolver las diferencias y llegar a un acuerdo sano para la pareja, sin embargo, existen otras alternativas que pueden ser de gran ayuda, como la terapia de pareja.
En definitiva, una crisis de pareja puede conducir a que la relación pase a otro nivel y se fortalezca con unas bases más sólidas en el respeto, la comprensión y el apoyo mutuo.
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