“La crisis del COVID-19 y su impacto en el sector tecnológico” es un estudio desarrollado por EAE Business School. Esta evaluación demostró que el uso de dispositivos electrónicos en campos laborales y el ocio se incrementó en casi un 40% durante el aislamiento. De acuerdo con el estudio, este es uno de los hábitos que llegó para quedarse como parte del nuevo escenario de distanciamiento social e incertidumbre en algunas áreas.
Romà Andreu, responsable del informe y docente de EAE Business School, explicó que hay razones para creer que la pandemia obligó a dar un paso hacía el mundo tecnológico que, en otro contexto, se habría seguido postergando. Esto, a su vez, de acuerdo con el profesor, hace aún más evidente las diferencias entre las sociedades y el acceso a las herramientas tecnológicas necesarias para poder ser parte de la nueva dinámica.
Según el estudio, el uso de los smartphones aumentó un 64% durante las primeras semanas de confinamiento en España. Si bien el incremento es significativo, está seis puntos por debajo de la media mundial. Por otro lado, el uso del ordenador portátil creció un 47%, siete puntos sobre la media registrada a escala global mientras que el uso de la PC se incrementó un 35%, cinco puntos más que en el resto del mundo. Otro apartado que subió en cuanto a su uso fue la consola, con un 12% más aunque dos puntos por debajo del medida internacional.
En cuanto a descargas de aplicaciones de vídeo conferencia, el estudio registró un aumento global. En España, una de las más búsquedas fue Houseparty, con especial aceptación en la generación Z. Esto produjo que las descargas se multiplicaran durante este tiempo de aislamiento preventivo. En Italia el incremento fue de 423 veces mientras que en Francia fue de solo 30 veces más que sus estándares previos a la pandemia. Otra aplicación que se descargó con frecuencia fue Hangouts Meet, de Google.
En esta línea, las aplicaciones de videojuegos también crecieron en cuanto a uso y descargas. En España, en particular, se incrementó hasta pasar de 43 millones de descargas mensuales a 66 millones. Este incremento de 20 millones también se produjo en países como Gran Bretaña, Francia, Alemania e Italia, aunque España fue el país que más aumento registró con un 53%.
Más allá de las aplicaciones para juegos y videoconferencias, el uso de las redes sociales fue otro de los aspectos estudiados. En este sector se produjo un aumento del 47% en España, porcentaje que es similar al del uso global. Se estima que este incremento puede influir en las dinámicas publicitarias de plataformas como Facebook. La plataforma de redes sociales explicó para el informe de EAE que, durante el mes de abril de 2020, la media de clics en sus anuncios publicitarios también aumento, tanto en escala local como internacionalmente.
Desde el punto de vista de Romà Andreu, esta información refleja que una de las consecuencias de la crisis está en el cambio de las dinámicas de consumo, ya que mucha gente está migrando hacia las plataformas digitales para atender diversas necesidades.
La velocidad de internet
Pero no todo es positivo. Debido al incremento en el consumo de datos todo el mundo está experimentado disminuciones en la velocidad de transmisión de internet, tanto móvil como fija. Debido al aumento de la demanda, distintos servidores no se están dando abasto y, por tanto, el servicio sufre algunos inconvenientes.
De acuerdo con el estudio, durante febrero y marzo de 2020 la velocidad de acceso móvil a internet creció solo un 3,7% y únicamente 10 países incrementaron su velocidad. En España se registró una caída del 9,8% en este sentido. En relación con los servicios utilizados para el teletrabajo, se calcula que en España aumentaron un 7% el de hosting, almacenamiento y computing, además del 9% en seguridad en la nube.
El impacto del COVID-19 en las organizaciones del sector
Aunque haya incrementado la relación de las personas con la tecnología, se estima que la industria tecnológica está experimentando un impacto negativo debido al COVID-19. Uno de los sectores que más lo está sufriendo es el orientado a la fabricación de equipos que dependen de proveedores y componentes externos a los cuales no pueden tener acceso.
Otra experiencia está viviendo el sector dedicado a los servicios. Este ha registrado un incremento notable, derivando en muchos casos en un aumento del valor de la compañía. Zoom, la plataforma de videoconferencia, ha sido una de las más descargadas a escala global. Este año ya triplican en un 330% sus ingresos previstos en relación con el año pasado.
Otras organizaciones como Apple y Microsoft han manifestado que no podrán cumplir las metas establecidas para la primera parte del año. Se estima que las empresas perderán entre 10 y hasta 80 millones de dólares. Uno de los ejemplos más evidentes de esto es Agilent Technologies INC., dedicada a trabajar con laboratorios en el área biosanitaria, que estima pérdidas de 50 millones de dólares durante este año. Otras organizaciones también están ajustando sus perspectivas de ganancias en relación con el año anterior.
Pese a las proyecciones negativas, muchas organizaciones se han adaptado de forma rápida a los nuevos escenarios, según información del estudio, y ayudando a atender los efectos de la pandemia. Este es el caso de Google, compañía que donó casi mil millones de dólares a causas vinculadas con la lucha contra el virus; Cisco, con 224 millones, Facebook con 122 millones y Netflix con 100 millones son otras de las compañías que han mostrado su lado más generoso en estas circunstancias a favor de una solución que permita reducir el impacto de la enfermedad. Junto con estas empresas, Tencent Holdings, Alibaba Gropu y Amazon también han destino millones de dólares a la causa.
Impacto del Covid-19 en la cadena de suministros
La ruptura de la cadena de suministros es una de las principales causas por las que el sector tecnológico ha detenido sus expectativas de crecimiento, de acuerdo con la información recabada por el estudio. Según Andreu, el confinamiento en China obligó al cierre de empresas responsables de la producción y distribución de componentes esenciales en el sector, influyendo en el resto de la dinámica productiva de diversas empresas.
El estudio concluyó que los tres sectores de la electrónica que pueden experimentar el mayor impacto negativo por la ruptura de la cadena de suministros son el de consumo, en un 40%, el industrial, en un 24% y el de automoción, con pérdidas estimadas en un 19%. Le siguen industrias estratégicas y de menor volumen, que también se verán afectadas por las consecuencias de la pandemia y la pausa en diversos sectores de la economía.
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