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¿En qué consiste el síndrome tech-neck?

El desarrollo tecnológico aplicado a los teléfonos móviles ha derivado en que, en la actualidad, el móvil se use para cualquier variedad de acciones menos para llamar. El principal objetivo del antiguo teléfono, era tender puentes de comunicación, pero poco a poco eso ha ido quedando atrás. Ahora hay múltiples formas de estar comunicados e intercambiar mensajes. Por tanto, es más sencillo manejar diversos recursos. Sin embargo, también hay una serie de factores y consecuencias asociadas al uso del móvil. Muchos de ellos se resumen en el síndrome del tech-neck, sobre el que a continuación se profundizará y se invita a los interesados en este universo a cursar un Máster en Medicina Estética para sumar todas las herramientas necesarias en este sentido.

Síndrome tech-neck: ¿Qué es?

El síndrome tech-neck es uno de los que experimenta, principalmente, la generación digital. Su nombre hace referencia a la aparición de signos de envejecimiento prematuro en distintas zonas del cuello. Se tratan de una serie de arrugas que se producen en esa zona como consecuencia del uso abusivo de diversos dispositivos digitales.

Este término fue definido hace más de un lustro. Guarda relación con la postura corporal que las personas toman al momento de usar el computador, el móvil, u otro tipo de dispositivos digitales. En relación con el móvil, se estima que lo vemos entre 100 y 150 veces al día. Por tanto se manifiestan diversos signos de envejecimiento prematuro, algo que se potencia con el paso del tiempo.

En todo esto también ha influido el tiempo de confinamiento que muchas personas han experimentado durante el último año y medio, volviendo de forma constante a los diversos dispositivos como una forma de consumir distintos contenidos. A esto se suman las diversas obligaciones debido al teletrabajo.

Más allá de esto, hay distintas soluciones que pueden tomarse. Sobre ellas se profundizará más adelante.

Tech-neck: ¿por qué ocurre?

Los correos, los mensajes de WhatsApp o Telegram, las notificaciones de diversas redes sociales o la navegación a través del móvil son hábitos que, con el pasar del tiempo, se han ido volviendo habituales. ¿Qué ocurre? Que bajamos de forma constante el cuello durante el día a día y, al menos, un centenar de veces.

A esto hay que sumar dos aspectos: la piel del cuello es bastante fina, algo que facilita que cambie su forma dependiendo del uso. En especial, si tenemos en cuenta que el cuello es una de las zonas del cuello que más se mueven. Por eso ocurre el síndrome de tech-neck, una línea o arruga en la piel producto del sube y baja del cuello.

Hay una serie de factores que influyen:

Revisión del móvil: así como el reloj, esta es una de las causas principales por las que desviamos la mirada hacia abajo, por lo general.

Luz azul: la luz azul de la pantalla afecta la piel, debilitándola y exponiéndola a otras cuestiones.

Poca hidratación: tanto la piel del cuello como del pecho son olvidadas con facilidad. Por tanto es necesario buscar maneras de hidratar esas zonas para evitar que se vean afectadas.

Piel fina y sensible: a sus características naturales, se suma que esas zonas, las del cuello y la del pecho, son sensibles por naturaleza. Esto exige mayores cuidados, tanto del sol como de otros factores climáticos, además de los cuidados que hay que tener en relación con el móvil.

¿Cómo se puede evitar tech-nech?

Hay una serie de medidas que se pueden tomar para evitar el impacto de estas cuestiones. A continuación se describen algunos de estos consejos para prevenir el envejecimiento prematuro del cuello.

Cuida la piel

Por lo general, se olvida que la piel es el organismo más grande del cuerpo. Por tanto, requiere de una serie de cuidados que se expanden a través de ella. Así como se prolonga por todo el cuerpo también es bastante frágil y requiere de múltiples cuidados. Por tanto, es necesario protegerla de factores como:

– Luz azul

– Exceso de luz solar

– Factores climáticos

– Contaminación

Esto se puede hacer a través de tratamientos y manteniendo una buena hidratación.

Tratamientos rejuvenecedores

Una de las principales causas del tech-neck es el uso del móvil, bajar de forma constante la cabeza hacia el dispositivo. Por tanto, aunque este comportamiento no es sencillo de manejar, se sugiere respaldar distintos hábitos con tratamientos de belleza para propiciar mejores resultados.

Uso de ácido hialurónico

El ácido hialurónico se aplica a través de microinyecciones, a través de las cuales también se aplican una serie de vitaminas que contribuyen a mejorar el estado de la zona. Estos tratamientos deben aplicarse previo a una revisión médica y de la mano de un especialista para alcanzar los resultados adecuados.

Alterar hábitos

Como se ha desarrollado, es clave buscar alternativas a los distintos hábitos que influyen en esta condición. ¿Por ejemplo? En vez de bajar la cabeza, es factible subir los brazos y hacia reducir el grado de inclinación. Así como este hay otros ejemplos o variantes, sujetos a las tareas de cada persona.

La postura

Es otra clave y está relacionado con el punto anterior. La postura influye en distintas fases de la salud. Por eso es conveniente y necesario monitorearla de forma diaria. De esa manera se pueden evitar dolores de espalda, cuello, cabeza, hombros, entre otras zonas.

Como se demuestra, acá influyen una serie de hábitos que pueden mejorar a través de los días.

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