Las partidas desde el 2011 se han reducido un 75%. Lo que supone un mayor esfuerzo económico de los estudiantes y sus familias.
Asociar las becas Erasmus con unas vacaciones es un estereotipo injusto y sin base.
Lo ideal es que la duración de la estancia se decida por motivos académicos y no por motivos económicos. Sería conveniente reflexionar sobre la importancia de Erasmus para la formación integral de los universitarios.
25 años de dedicación al programa Erasmus y convertirse en una de las Universidades europeas que envía y recibe más alumnos, tiene premio.
La OAPEE (Organismo Autónomo Programas Educativos Europeos) ha reconocido a la Universitat de Valencia por su implicación en todas las acciones del programa Erasmus.
En un momento en el que estas becas están de actualidad hablamos con Olga Gil, vicerrectora de Relaciones Internacionales de la UV.
¿Qué significa para la UV este reconocimiento honorífico?
La Universitat de València realiza un gran esfuerzo institucional en la organización del programa Erasmus y ha sido muy importante que la OAPEE haya reconocido este esfuerzo colectivo sostenido durante muchos años y en el que se han comprometido un número muy grande de miembros de la comunidad académica.
¿Qué ventajas supone para los alumnos interesados en estas becas?
Hay muchas ventajas en la realización de parte de las materias del currículo en una universidad extranjera.
Podemos mencionar el aprendizaje de idiomas, el aprendizaje de otras metodologías docentes, posibilidad de cursar contenidos diferentes a los que se ofrecen en la universidad de origen, la madurez intelectual que supone enfrentarse a otras culturas, abrir puertas para un futuro profesional en un mundo globalizado.
¿Qué valores diferenciales ofrece la UV respeto a otros centros?
Los aspectos que se han valorado positivamente son diversos.
- En primer lugar, la cantidad de estudiantes que se mueven en el programa más conocido que es el de intercambios para estudios.
Estamos siempre entre los cinco primeras universidades tanto en cuanto al número de recepción como de envío. El pasado curso recibimos unos 1.700 estudiantes y enviamos más de 1500.
- En segundo lugar, la diversidad de programas en los que la Universitat de València participa y que suelen ser menos conocidos:
Envío de estudiantes a prácticas en empresas europeas, recepción de estudiantes en prácticas, cursos intensivos de idiomas, coordinación y participación en redes para organización de programas intensivos, y otras acciones en redes europeas las más conocidas son los máster Erasmus-Mundus, estancias con fines docentes o formativos de profesores y administradores.
- También se mide la calidad de gestión: académica y económica.
La aportación de fondos propios tanto para el aumento de las ayudas europeas y ministeriales como para cuestiones relacionadas con las competencias lingüísticas de los participantes, así como la difusión e información de los programas.
¿Por qué decide la UV apostar por las becas Erasmus?
La Universitat de València participa en el programa Erasmus desde sus comienzos hace 25 años. Al principio se hacía por una apuesta individual de profesores y de centros que tenían interés en que los estudiantes conocieran las universidades europeas con las que ellos mantenían contactos.
Desde hace más de 10 años, los diferentes responsables de la UV han sido conscientes de la amplitud de la participación en el programa y de que esta movilidad podría ser uno de los puntos fuertes de la Universitat de València a fomentar.
Además es la cuarta universidad europea en recepción de alumnos Erasmus. ¿Cómo se consigue?
Efectivamente, en el último curso del que se tienen datos consolidados estamos en la cuarta posición y de hecho durante varios años hemos sido la segunda universidad europea en recepción. Existen varios factores.
En primer lugar, tratarse de una universidad que cubre un espectro muy amplio de titulaciones.
En segundo lugar, que los profesores de la UV tienen una larga tradición de relaciones con universidades extranjeras por razones de investigación y colaboraciones académicas diversas y estas relaciones evolucionan a intercambios de estudiantes.
El hecho de estar situada en la ciudad de Valencia y el atractivo turístico de la zona que es bien conocida en Europa también ayuda, claro está.
Finalmente, al tratarse de un programa de largo recorrido: la satisfacción de los estudiantes con su estancia hace que sea un destino recomendado por las universidades de origen.
Hay una visión que asocia las becas Erasmus con unas ‘vacaciones’ para los estudiantes. ¿Está de acuerdo? ¿Se han intentado desprestigiar estas becas?
Se trata de un estereotipo injusto que no tiene ninguna base.
Las calificaciones que obtienen los estudiantes en sus periodos de movilidad Erasmus son totalmente comparables con las que obtienen en sus universidades de origen.
Así que el esfuerzo que realizan, en general, para obtener estos resultados es mayor para poder superar las dificultades añadidas del cambio de idioma y de sistema de enseñanza.
¿Qué le parece la reciente decisión de reducir el tiempo de estancia para garantizar las plazas? ¿Cree que será positivo para las becas Erasmus?
Las partidas que se emplean para las estancias de estudiantes universitarios ya sean para completar estudios como para realizar prácticas en empresas son una inversión importantísima no solo para el futuro de quienes las realizan sino para que las aulas universitarias sean un espacio de mayor riqueza formativa.
Desde el 2011 al 2014 se han reducido en un 75%. Lo que supone un mayor esfuerzo económico de los estudiantes y sus familias para mantener los niveles de participación española en el programa.
Sería conveniente que se reflexionara sobre la importancia de Erasmus para la formación integral de los universitarios y la cohesión europea y se intentara aumentar el presupuesto de 2014, al menos en la misma medida que se hizo finalmente el pasado año, tras la queja masiva de los estudiantes.
Con este aumento no sería necesario haber tenido que elegir entre menos estudiantes o menos meses, como ha sucedido.
Lo ideal es que la duración de la estancia se decida por motivos académicos y no por motivos económicos. Actualmente en la Universitat de València la tercera parte de los estudiantes realiza estancias de un semestre, dependiendo esencialmente del curso en el que se encuentren, de la universidad de destino y de la titulación que estén cursando.
¿Qué cambiará con el nuevo programa Erasmus+?
Los presupuestos europeos se elaboran y aprueban cada 7 años y en gran medida los programas europeos cambian por tanto cada siete años. Erasmus+ es el nombre que le han dado en el septenio 2014-20 a lo que se denominaba PAP (Programa de aprendizaje permanente) en el período 2007-13.
En ambos casos contiene –en el área de las enseñanzas universitarias– el programa Erasmus Estudios y los otros que he mencionado antes: prácticas, redes, másteres conjuntos, movilidad de trabajadores de las universidades. Pero también un gran número de acciones en el resto de ámbitos educativos: escolar, secundaria, FP y formación de adultos, entre otros.
En el caso del programa Erasmus para estudiantes universitarios el mayor cambio probablemente sea que –así como antes un estudiante solo podía solicitar la beca una vez para la estancia de estudios y otra para la estancia en prácticas– ahora puede solicitar varias veces a lo largo de su vida, con la única restricción de no superar los 12 meses en cada ciclo: grado, máster, doctorado.
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