La formación online lleva mucho tiempo instalada y acoplada a nuestra vida pero con la actual crisis sanitaria hemos vivido una auténtica revolución en el ámbito de la formación. La formación presencial se ha tenido que adaptar a virtual en muy poco tiempo, y hemos visto cómo nuestros pequeños, los universitarios y los trabajadores y trabajadoras que apuestan por la formación se han adaptado al cambio sin problema.
Tras el cambio, ahora muchos se preguntan no solo por el teletrabajo sino también por la teleformación y sus posibilidades, así como por los retos que implica para los formadores, que pierden cercanía en pro de la inmediatez. Así pues, podemos hacer un repaso por algunas de las claves que la inmediatez de las nuevas telecomunicaciones nos ofrece, claves de su rotundo éxito.
Respuestas al momento
Con la teleformación no hace falta ya llevarse trabajo para casa con los clásicos «debo consultarlo, mañana os traeré la respuesta», o «hay un fragmento muy interesante sobre esta cuestión en un libro de X, os lo traeré el próximo día». Puede darse algún caso, pero la formación online nos permite hacer búsquedas de información al momento, sin necesidad de perder ni un minuto del tiempo de ocio en estas cuestiones.
Más conectados
Parece mentira pero las telecomunicaciones nos conectan de un modo distinto, no más próximo pero sí más inmediato, que la comunicación presencial. Si lo pensamos un poco esto tiene bastante sentido: en la comodidad de la habitación, el estudio o la cocina, seguimos siendo nosotros mismos pero no tenemos los mismos miedos. En un aula presencial muchos alumnos y muchas alumnas temen meter la pata o simplemente son vergonzosos y no son capaces de expresarse públicamente; en un chat se antepone una barrera que nos permite desenvolvernos socialmente de otro modo y disolver algunos aspectos que en presencial están muy presentes.
Mayor acceso a la información
El hecho de que en aula virtual se graben las sesiones y podamos recurrir a ellas en cualquier momento, con la conversación de chat incluida, es sin duda una de las grandes ventajas de la teleformación, clave de su éxito. Si nos despistamos de algo o simplemente queremos volver a ver una sesión porque no entendimos algo, para hacer una tarea o simplemente porque nos gustó la sesión y queremos recordarla, podemos hacerlo siempre que queramos. Esta es sin duda una ayuda inestimable y uno de los puntos fuertes de la teleformación.
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