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¿Qué es la comunicación asertiva?

Comunicarnos es imprescindible para mejorar nuestras relaciones en cualquier ámbito, aunque principalmente en el labora, además te permitirá elevar la confianza en ti mismo y mejorar el entendimiento. La comunicación asertiva sirve para cumplir este objetivo. Hoy analizaremos qué entendemos por este tipo de comunicación y cuáles son los tipos existentes.

¿Qué es la comunicación asertiva?

La comunicación es susceptible de ser entendida como aquella relación que existe entre un emisor y un receptor, mediada por un mensaje. No obstante, podemos entender a la comunicación asertiva como la capacidad de expresar sentimientos, ideas u opiniones de manera confiada, clara y partiendo del respeto. Es, en definitiva, un tipo de comunicación abierta, directa y honesta, que utiliza un tono pausado y no amenazante. Se centra en la claridad pura para impartir su mensaje

Aquel que logran entablar una comunicación verdaderamente asertiva, está velando por las necesidades y derechos de los demás: su meta es alcanzar que el mensaje se comprenda en su plenitud, incluyendo las emociones expresadas.

¿Cuáles son las características de la comunicación asertiva?

Para lograr que nuestra comunicación sea asertiva es necesario partir de una serie de consideración sobre elementos que tienen que ver con los diferentes aspectos emotivos, psicológicos y pragmáticos. Estos son:

  • Claridad. Esta máxima se basa en expresar tus necesidades, sentimientos y deseos de manera respetuosa, apropiada y clara.
  • Localización. Elegir el lugar adecuado para mantener una conversación importante. Las personas suelen mostrarse más comprensivas en un lugar apacible, tranquilo y seguro que en otro ruidoso, lleno de distracciones o incluso amenazante, por ejemplo, un lugar con muy poca iluminación.
  • Articulación. Implica el tono de voz y los modos en que pronunciamos las palabras. Estos inciden fuertemente en nuestra comunicación; muchas personas se agotan y desaniman al escuchar a alguien que habla a muy alta velocidad o susurra. Es importante prestar atención a tu tono de voz y ritmo de habla al querer dar un mensaje claro.
  • Postura corporal. El cuerpo también expresa mensajes. Tu postura debe ser abierta y franca para así generar confianza en el interlocutor y transmitirle interés y sinceridad; sin olvidarse de tener contacto visual al hablar y escuchar.
  • Gesticulación. Los gestos que realizamos al hablar pueden reforzar lo dicho o transmitir lo contrario y confundir al receptor. Trata de ser coherente y acompañar lo que hablas con tus gestos.
  • Reciprocidad. Presta atención para no caer en un monólogo. Trata de invertir el mismo tiempo que hablas en escuchar a la otra persona para no transmitir indiferencia. Es la predisposición a realmente escuchar.

Tipos de comunicación asertiva

A partir de las características antes mencionadas, podemos determinar tres niveles de comunicación asertiva, estos tipos son:

  • Verbal. Es aquello que dices; el mensaje que quieres expresar oralmente, las palabras que escoges, la manera de construir tus oraciones.
  • No verbal. Todo aquel mensaje no lingüístico que rodea al lenguaje durante la comunicación. Como la localización, gesticulación y postura corporal.
  • Paraverbal. Es una intermedia entre lo verbal y lo no verbal. Se refiere a los elementos que forman parte del mensaje, la manera en que se dicen las cosas, el ritmo, la articulación o el tono de voz.

Cómo desarrollar la comunicación asertiva en el trabajo

Ser asertivo en el trabajo es imprescindible, es uno de los lugares donde más tiempo pasamos, por lo que mantener una relación saludable con las personas que allí nos acompañan.

Comunicarnos de modo asertivo en tu ambiente laboral puede otorgarte muchos beneficios, entre ellos: puede ayudarte proyectando confianza; también es útil para resolver conflictos y diferencias, creando un mejor ambiente. A continuación vamos a darte una serie de pasos para desarrollar esta competencia en tu trabajo:

  1. Comunica sin juzgar: Separar cualquier prejuicio de los comentarios u opiniones que quieras expresar es indispensable para comunicarte de manera asertiva. Busca la manera más objetiva posible de comentar algo. Si tu interlocutor percibe que tu juicio está viciado, es muy probable que deje de escucharte o se ponga a la defensiva de inmediato.
  2. Identifica y expresa tus sentimientos: Ten presente que, en muchas ocasiones, la información que recibas puede ser incorrecta, o incluso lo que pienses y la interpretación que tú le des puede ser errónea; sin embargo, lo único que es indiscutiblemente real son tus sentimientos. Deberás describir tus propias sensaciones internas y no explicar tus pensamientos o interpretaciones de los actos realizados por los demás.
  3. Encuentra tu necesidad no satisfecha: La plenitud se logra al satisfacer tus necesidades, los sentimientos son creados en base a esas necesidades. Si no puedes comprender los motivos que llevan a alguien a actuar de una determinada manera, es mejor analizar y descubrir cuáles son las necesidades que están detrás de ello.
  4. Haz peticiones activas y concretas: Debemos comunicar de la manera más clara posible lo que queremos de los demás para ayudarse mutuamente a identificar aquello que satisfaría tu necesidad. Por ello debemos buscar comunicar aquello que sí queremos en lugar de lo que no.

La comunicación asertiva, en definitiva, es una nueva manera de relacionarte con las personas que te rodean y de contribuir a tu vida. Empieza a practicarla y comprobarás el cambio para conectar con las personas.

Fuente: Inenka

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