Si estás pensando en montar un negocio de hostelería, llevar a cabo tu sueño en este sector tan prospero te va a costar sudor, pero el resultado puede ser enorme. La hostelería ha dejado de ser un negocio para toda la vida, la competencia es muy dura y la capacidad de adaptación es vital. La hostelería, para bien o para mal, es un sector muy poco profesionalizado, ya que no son necesarios ni estudios ni preparación para poder trabajar en ello.
Todo ello ha propiciado que los negocios gastronómicos hayan proliferado enormemente. Como ves, no será un camino fácil, así que no te dejes llevar por la ilusión del comienzo y no caigas en los errores más comunes.
Hoy te contamos los 10 errores más comunes que debes evitar:
- Un restaurante lo puede montar cualquiera: error. Para gestionar un restaurante adecuadamente debes de tener nociones de gestión empresarial (económica, comercial, personal, etc.). La inexperiencia de los propietarios es uno de los principales motivos de cierre.
- ¿Qué cocinamos?: llega la hora de abrir las puertas de tu local nuevo y flamante, y debéis determinar el tipo de cocina que haréis. Error garrafal. Este aspectos es el primero que debéis determinar, ya que será el que estructurará el negocio; no es lo mismo una hamburguesería que una marisquería.
- Todos somos buenos camareros: la rotación de personal es una de las mayores lacras en este sector, es importante cuidar al personal para que este dure en el negocio.
- La hostelería no significa esclavitud: las largas jornadas de trabajo se han acabado. El sector de la hostelería también ha evolucionado hacía la conciliación de los empleados, porque todos tenemos vida más allá del trabajo. La empatía es clave para tratar a los empleados, si trabajan más contentos, serán más productivos.
- Rentabilidad del negocio: llenar la sala no significa ganar más por mucho que facturen. Antes de iniciarnos en este sector es necesario hacer un plan de viabilidad para conocer los costes reales del negocio.
- Formación siempre: estar al día y reciclarse en la formación es una inversión que nunca debes de obviar.
- La imagen importa: un restaurante ha dejado de ser un sitio donde sólo se come, es decir, cada vez valoramos más cosas: el local, el trato, los pequeños detalles y lo a gusto que nos sentimos. Un buen restaurante debe diferenciarse.
- No se puede gustar a todo el mundo: no ofrezcas de todo para englobar a más público porqué será un grave error. Debes destacar con un tipo de cocina en concreto donde innovar y hacerte tu propia carta, única y exclusiva.
- Planteárselo bien antes: aunque pueda parecer un sector muy atractivo, requiere de mucho esfuerzo y mucho trabajo, por ello, te recomendamos que si no es tu sector, mejor no te metas. Te ahorrarás disgustos y dinero.
Si a pesar de estos consejos, tienes claro que quieres formarte en el sector de la hostelería, como ya habrás visto, la formación es un pilar fundamental y en Escuela de Hostelería Benidorm apostamos por los mejores cursos y masters en el sector. Visita http://www.hosteleriabenidorm.com y escoge el tuyo.
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