MÁSTER PROPIO EN DERMOFARMACIA Y COSMÉTICA. IV EDICIÓN

El farmacéutico, como profesional de la salud, es uno de los principales expertos implicados en el cuidado de la piel, cabello, uñas, dientes, etc tanto sanos como dañados. Los cuidados dermatológicos y cosmetológicos representan un área de gran interés para los estudiantes y los profesionales del sector y tienen, además, una gran demanda social. Tanto es así, que en los planes de estudio del Grado de Farmacia de muchas universidades se incluye la Dermofarmacia como asignatura optativa con el fin de aportar, a aquellos que lo deseen, unas nociones básicas sobre esta disciplina.

El cuidado y embellecimiento del cuerpo ha sido motivo de preocupación a lo largo de los siglos pero actualmente asistimos a una explosión de preocupación por la salud y la belleza ligada íntimamente a la sociedad del bienestar. En muchas ocasiones se habla de la belleza como un mero concepto estético pero no cabe duda que belleza y salud son dos conceptos completamente relacionados. Un estado óptimo de salud y nutrición, unos hábitos de vida saludables y unos cuidados cosméticos adecuados se reflejan en la calidad y el aspecto del cabello, de las uñas y de la piel. La belleza y la salud condicionan la calidad de vida, las relaciones interpersonales y redundan de manera directa en el nivel de autoestima y satisfacción personal. Las áreas relacionadas con la belleza y cuidado del cuerpo preocupan a todos los sectores de la sociedad y a todas las franjas de edad. Además, el fenómeno demográfico de envejecimiento progresivo de la población y el aumento de la esperanza de vida implica la necesidad de intensificar esos cuidados con el fin de alargar, en lo posible, la apariencia agradable y juvenil. Este amplio mercado aboca a los científicos de ahora, al igual que hicieron antes sus predecesores, a la búsqueda del elixir de la eterna juventud. Los nuevos productos, técnicas y metodologías permiten día a día que ese mito esté cada vez más cerca.