Ventosas, Guasha y Moxibustión, Sevilla

Aplicado en el cuerpo, con una acción de succión o presión negativa, el masaje con ventosas drena el exceso de líquidos y toxinas, estimula el sistema nervioso periférico y la circulación de la sangre estancada en los músculos y la piel, suelta las adhesiones en el tejido conectivo y los nudos en los tejidos blandos, tonifica los puntos vitales, a la vez que crea un profundo estado de relajación y bienestar. En el aspecto estético, es muy eficaz para tratar la celulitis o las arrugas por ejemplo.

Además, complementaremos está técnica con la aplicación del Gua Sha (piedra de Jade), que consiste en la tonificación de zonas reflejas mediante el frotado superficial de la piel. El Gua Sha remueve las toxinas, estimula la oxigenación de los tejidos y activa la circulación de la sangre y de la energía favoreciendo la nutrición de la piel.

La aromaterapia refuerza los efectos de estas dos técnicas. En el curso se estudiarán los aceites esenciales más beneficiosos para los problemas musculares y reducir la celulitis y se fabricará un aceite corporal y una crema anticelulítica. Los-as participantes se llevarán a casa los productos que habrán confeccionado en clase y una ventosa.

En la moxibustión el calor se obtiene quemando una planta conocida como ‘moxa’ o Artemisa Vulgaris (en su nombre científico). Mediante la transmisión de este calor se consigue que los impulsos provocados por las terminaciones nerviosas de la piel dilaten los capilares, de manera que se mejora la circulación general del cuerpo y, más concretamente, de los puntos sobre los que se aplica este calor. La moxibustión no sólo consigue una agradable relajación corporal, si no también contribuye a mejorar determinadas dolencias como, por ejemplo, los dolores articulares, lumbago, alteraciones digestivas (náuseas o digestiones pesadas), dolores menstruales, insomnio... Es u