La entrevista de salida es un intercambio de impresiones que se realiza entre el trabajador y la empresa cuando el empleado decide abandonar su puesto. De hecho, estos encuentros persiguen dos grandes objetivos: por un lado, hacer balance sobre la relación laboral que finaliza; por el otro, fomentar la autocrítica dentro de la propia empresa. De esta forma, los responsables de Recursos Humanos disponen de más información para evitar la fuga de talentos en el futuro. Pero, ¿son tensas las entrevistas de salida? ¿Cuáles son las preguntas más frecuentes? Aunque puede haber momentos de una cierta tensión (sobre todo si dejamos el trabajo a disgusto), conviene mantener una actitud profesional y centrarse en las críticas constructivas. En cuanto a los temas de temas de conversación, hay tiempo para todo: desde el motivo por el cual se deja el trabajo hasta la satisfacción con el salario recibido.
En este post, te presentamos 5 consejos para afrontar una entrevista de salida con garantías. Para empezar, te recomendamos que naturalices la situación y te tomes el encuentro como una oportunidad para expresarte. Si puede ser, intenta hacer la entrevista presencialmente y evita llamadas o videoconferencias: el intercambio será más fructífero, ya que la comunicación no verbal resulta bastante reveladora en estos casos. Por otra parte, ten en cuenta que, además de la entrevista, es probable que tengas que realizar un traspaso con la persona que te va a sustituir. En estos casos, lo mejor es explicar el trabajo de forma concisa, dar algún consejo y evitar las apreciaciones negativas. ¿Y tú? ¿Ya estás preparado para cambiar de trabajo? ¡Mucha suerte en esta nueva etapa!
5 tips para realizar una entrevista de salida fructífera
- No te precipites. Después de un tiempo trabajando para la empresa, es normal que hayan surgido vínculos de todo tipo: algunos más positivos y otros más negativos. Así pues, puede que las sensaciones antes de afrontar la entrevista sean contradictorias. Si ves que afloran los nervios, procura calmarte. Tómate tu tiempo, piensa bien lo que quieres decir e intenta trasmitir un mensaje conciso.
- Haz críticas constructivas. Una de las principales finalidades de una entrevista de salida es que la empresa pueda hacer autocrítica. Es decir, los superiores querrán saber qué ha fallado contigo (o que podrían mejorar) para no repetir errores en el futuro. Es importante que argumentes bien tus críticas y que evites los ataques personales. Tómatelo como un último servicio a la entidad: se trata de criticar para mejorar, no para tensar la cuerda con tus excompañeros.
- Valora los aspectos positivos. Si abandonas el trabajo por iniciativa propia, es probable que te haya surgido una oportunidad laboral mejor. Aún así, si en su día escogiste esta empresa fue por algún motivo. Además de las críticas, ten en cuenta el capital humano y laboral que has acumulado durante esta etapa. En otras palabras: no te limites a criticar y haz un esfuerzo por reconocer los aciertos.
- Habla sin miedos de tus motivos. ¿Te vas porque has encontrado la oportunidad de crecer en otro empleo? Si es así, no lo escondas: los profesionales de Recursos Humanos saben que la vida laboral es dinámica. Es más, tu experiencia puede servir para mejorar el trato con los trabajadores que se quedan y para darles más oportunidades.
- Mantén una actitud sincera y cordial. Debes afrontar el reto con educación y sinceridad, igual que el día en el que fuiste contratado. Quizá en algún momento te interesa volver a la empresa: cuida las relaciones.
Tips extra:
- Piensa en hablar de tus expectativas al inicio del trabajo, así el departamento de recursos humanos puede entender a profundidad tus razones tras la decisión de abandonar el puesto y esto les servirá como feedback para la empresa.
- Toma este proceso como una oportunidad para que el responsable del área de recursos humanos aprendes a definir una mejor estrategia, centrada en las personas y en la experiencia de los empleados.
