Aunque parezca misión imposible, con práctica y compromiso, se puede mejorar la gestión emocional. Todo empieza por conocernos mejor a nosotros mismos, aceptar lo que sentimos y poder expresarlo. Y te preguntarás, ¿cómo llevarlo a la práctica? ¿Cómo gestionar las emociones sin fallar en el intento? Te damos las técnicas y métodos más eficaces, a continuación.
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¿Qué es la gestión emocional?
La gestión emocional es la capacidad de reconocer, procesar y regular las emociones. Esto implica comprender y aceptar sentimientos, encontrar formas adecuadas de expresarlos y utilizar estrategias para regularlos.
Saber gestionar bien las emociones repercute en el bienestar y autocuidado personal. Y es que reconocer lo que sentimos, nos concede una mayor capacidad de expresar sentimientos de forma saludable, y de afrontar mejor situaciones difíciles y estresantes.
¿Se pueden manejar las emociones?
Si bien es cierto que no es tarea fácil, gestionar las emociones es una práctica posible si sabemos cultivarla y comprometernos con ello. ¿Los aliados? Utilizar las estrategias y técnicas que nos sean útiles para manejar lo que sentimos. Para ello, el primer paso es ser consciente de nuestras emociones. Es decir, saber reconocer cuando estamos ansiosos, contentos o tristes, aceptarlo y ayudarnos de las técnicas que nos resulten más efectivas para gestionar toda esa carga emocional.
Cómo gestionar las emociones: 4 técnicas efectivas
Veníamos diciendo que hay técnicas que nos ayudan a manejar las emociones. Obviamente, a cada uno le pueden funcionar unas o tras, pero a modo de ejemplo. Si quieres saber cómo gestionar las emociones de forma efectiva, toma nota de estos ejercicios de gestión emocional:
- Practicar la respiración profunda
La respiración profunda es una forma estupenda de relajarse y gestionar las emociones. Te ayuda a ser más consciente de tus sentimientos y puede ayudarte a reducir el estrés y la ansiedad.
- Escribir un diario
Plasmar en un papel lo que pensamos y sentimos es una táctica muy útil para procesar y liberar emociones. Asimismo, es una técnica que ayuda a hacer retrospección y comprender mejor las emociones que nos invaden.
- Hacer ejercicio
El ejercicio libera endorfinas, que ayudan a reducir el estrés y a mejorar el estado de ánimo. A su vez, esto se traduce a una mejora en la gestión emocional y el bienestar integral.
- Acudir a terapia
Hablar con un terapeuta profesional es una de las mejores técnicas para aprender a gestionar las emociones de forma eficaz. En la mayoría de los casos, los especialistas emplean la terapia cognitivo-conductual para que el paciente pueda cuestionarse sus pensamientos y creencias negativas que acentúan el malestar emocional.
- Meditar
La meditación es una forma estupenda de relajarse y ser más consciente de los pensamientos y sentimientos. Conectar con nosotros mismos y el momento presente permite comprender mejor lo que sentimos y desarrollar nuevas estrategias para gestionarlo.
Estas son sólo algunas de las muchas técnicas y ejercicios que pueden ayudar, y mucho, a gestionar las emociones. Eso sí, hay que tener paciencia y compromiso para notar sus efectos y favorecer el bienestar emocional.
