Son muchas las personas que cada año se plantean hacer oposiciones y poder entrar en un trabajo como funcionario. Un ascenso laboral, en un puesto más estable y sin problemas, además de la vocación, son los principales motivos para optar a un puesto en una Administración Pública. Entre todos estos puestos, destaca uno por encima de todos: ser administrativo del Estado.
Pero ¿qué funciones y desde dónde puede accederse a este puesto de trabajo?A continuación, se aportan todos los detalles.
Funciones del administrativo
Los administrativos del Estado trabajan en departamentos y organismos del Gobierno. Sus responsabilidades son varias, centrándose en las tareas administrativas que pueden ir desde gestionar las cartas o correspondencia hasta la administración de subsidios por desempleo. Además, pueden llegar a realizar labores de supervisión de papeleo, usar ordenadores para el análisis de datos y la compilación de estadísticas.
Entre las funciones y competencias que debe realizar este profesional, estarían las siguientes:
- Analizar todo tipo de información que llega a su departamento.
- Concertar citas tanto con ciudadanos como con empresas e instituciones.
- Gestionar la formación del personal público.
- Realizar análisis y planificación de tareas.
- Desarrollar aptitudes para la toma de decisiones, la planificación y la organización.
- Realizar entrevistas a personas.
- Negociar.
- Trabajar con presupuestos fijos.
- Gestionar problemas y contar con información confidencial.
Es decir, las funciones de este empleado son las referidas a la gestión de tareas administrativas y a apoyar a las comunes en las actuaciones de la Administración. Sus funciones también se proyectan sobre diferentes áreas de tramitación y la ordenación de procedimientos, además de la gestión de recursos humanos, económicos y financieros.
Por último, puede llegar a participar en el desarrollo de políticas sociales, económicas y medioambientales. Estas tareas puede desempeñarlas tanto en la sede central como en las delegaciones de las comunidades autónomas.
Con una FP de Administración y Finanzas puede optarse a trabajar como funcionario administrativo del Estado
Con una titulación de Formación Profesional de la rama de Administración y Finanzas se puede llegarse a optar por un puesto de funcionario administrativo del Estado. Es una de las titulaciones con más contrataciones incluso en el ámbito privado (se calcula que casi 180 000 contratos firmados durante todo un año corresponden a titulados de esta FP superior).
Esta titulación, completándose sus estudios en dos cursos, consta de 2000 horas de formación y prácticas en centros de trabajo (FCT). Entre las asignaturas más importantes destacan Contabilidad, Comunicación y Atención al Cliente e Informática (en la que se aprende a manejar las aplicaciones ofimáticas, por ejemplo). También destacan como asignaturas importantes inglés, Recursos Humanos y Auditoría.
Además, tras una modificación de la ley, los técnicos superiores pueden acceder al grupo B de funcionariado, antes reservado solo para los diplomados, y subir una escala más en la carrera de funcionario.
Cursar esta formación profesional para acceder a un puesto de funcionario en la Administración Pública como administrativo del Estado es la mejor opción para contar con un puesto de trabajo de calidad. Además, las posibilidades de crecer profesionalmente son amplias.
Fuente: IFP
