Curso de auxiliar de farmacia: ¿Cuáles son las funciones de un auxiliar farmacéutico?

Una farmacia no es un centro de trabajo como otro cualquiera: a diferencia de la mayoría de oficinas, los trabajadores de estos establecimientos asumen una gran responsabilidad día tras día. No podemos olvidarnos de que es un centro de Atención Primaria de la Salud y una de sus funciones principales, además de dispensar medicamentos, es la de educar al paciente-cliente sobre el buen uso de los mismos.

En el momento en el que un cliente entra en una farmacia, no es capaz de distinguir si la persona que se encuentra detrás del mostrador es un titulado o un auxiliar. Sea quien sea, el trato y el servicio ha de ser el mismo, por lo que tiene que estar dotado de una serie de conocimientos que le conviertan en un profesional.

Hoy en día prácticamente todas las farmacias precisan de un auxiliar. Este trabaja con el farmacéutico ayudando a aumentar los beneficios, lo que va unido a generar unasatisfacción y confianza plena de los pacientes-clientes.

No obstante, la figura de auxiliar también tiene unas funciones fijas muy específicas. Estas son algunas de ellas:

• En primer lugar, recepciona los pedidos de la farmacia y realiza las labores propias de almacenamiento. Esto es vital para estar siempre bien aprovisionados. También se encarga de reponer la mercancía en la tienda y de ordenar el almacén.
• Por otra parte, debe controlar el periodo de vigencia de los medicamentos para evitar que caduquen en el almacén. Tendrá que determinar cuáles tienen una fecha de vencimiento más temprana y por lo tanto deben venderse cuanto antes. Así se asegurará de que la farmacia funcione sin inconvenientes.
• Otra de las responsabilidades a las que se enfrenta un auxiliar farmacéutico es la de conocer y controlar aquellos medicamentos que posean unas características más delicadas o incluso algún aspecto tóxico; conservándolos según lo establecido en cada caso.
• También debe elaborar los informes que se le solicitan por parte de sus superiores.
• Por último, la labor de mayor responsabilidad es la de dispensar medicamentos. Para la realización de esta tarea, deberá poseer unos conocimientos teóricos entre los que se encuentran cómo atender un cliente. Teniendo en cuenta que la mayoría de ellos son personas que acuden por ver resentida su salud, debe empatizar con ellos para que sientan que “están en buenas manos”. En muchas ocasiones, que el cliente vuelva o no depende del trato recibido.

Hoy en día estamos rodeados de noticias que auguran un futuro próspero para los trabajadores del mundo farmacéutico. El número de colegiados va aumentando en función del incremento del número de farmacias en España. Nuestro país es el tercero en la Unión Europea con más establecimientos de este tipo. Los Auxiliares de Farmacia son imprescindibles en todas ellas, así como en hospitales del sistema público y privado. La mayoría de ellos han ampliado sus plantillas farmacéuticas integrando nuevos auxiliares.

Fuente: Blog Implika Formación