Alimentación y deporte son dos términos que van de la mano. Existen maneras muy variadas de alimentarse y el deportista debe saber escoger las comidas más convenientes para su salud, ya que esto influirá en su rendimiento físico.
La dieta a seguir ha de ser equilibrada, variada y saludable, y la ingesta de alimentos debe estar programada con un mínimo de 5 comidas al día. Además, es imprescindible unacorrecta hidratación, ya sea por medio de agua, caldos vegetales, infusiones o zumos de frutas. Si el desayuno se realiza a una hora temprana, es recomendable comer algo a media mañana. La dieta debe adaptarse a cada tipo de deportista y a su estado nutricional.
Qué se come y cuándo se come tiene una gran repercusiónen el rendimiento y la energía necesaria para hacer deporte. Estos son los alimentos estrella en la dieta de un deportista:
– Pan: Es una fuente de hidratos de carbono insustituible e idóneo para cubrir las necesidades alimenticias. El más adecuado es el pan multicereal o con semillas, que aumenta su valor nutricional en proteínas, vitaminas y minerales.
– Patatas: Fácilmente digeribles y saciantes. La mejor manera de consumirlas son hervidas, con piel y con poca agua. Las otras formas de cocinarlas que requieren grasa para su preparación, como fritas, salteadas o en tortilla, se deben evitar en días de prueba deportiva.
– Pasta: Con un alto contenido en hidratos de carbono, aportan la energía necesaria para enfrentarse a una sesión de deporte extremo. Las integrales, por su parte, presentan mayor nivel en carbohidratos, vitamina B y minerales; por lo que son más recomendables.
– Cereales: Procedentes de maíz, arroz, avena o trigo, son cada día más aceptados en la dieta habitual. Su consumo, junto con derivados lácteos, constituye una mezcla altamente energética y completa en el aspecto nutricional.
– Huevos: Tienen un alto valor proteínico, rico en lípidos y de fácil digestión. La mejor manera de consumirlos son cocidos o en zumo.
– Arroz: Con preferencia del arroz integral frente al refinado, constituye una fuente importante de hidratos de carbono de absorción lenta, junto con proteínas de mayor calidad biológica.
– Verduras: Son indispensables por su riqueza en vitaminas, minerales y fibra. En cuanto a las verduras verdes; como las espinacas, canónigos, rúcula o brécol, es recomendable tenerlas presentes a diario por su riqueza en magnesio, ácido fólico, vitamina K y hierro vegetal.
– Fruta: son alimentos poco calóricos y que aportan muchas vitaminas y minerales antioxidantes que ayudan a poner al organismo a punto. Se aconseja comer tres raciones diarias.
– Frutos secos: Aportan proteínas, vitaminas, minerales y ácidos grasos. Son alimentos de un alto valor nutritivo con grasas insaturadas.
– Leche: Aporta vitaminas, minerales, proteínas y ácido fólico, imprescindibles en la dieta de un deportista.
Una buena alimentación influirá directamente en el rendimiento deportivo, mostrando con mayor rapidez y facilidad los resultados esperados. Habrá días más duros que otros; pero no debes desanimarte: todo esfuerzo tiene su recompensa.