Ahora, con la crisis del covid-19 los equipos de protección individual se han puesto de moda en las conversaciones del día a día, pero todavía hay mucho desconocimiento sobre su correcta función y utilización.
Las redes sociales, los noticieros y los medios de comunicación no ofrecen información de valor sobre este tema e incluso llegan a generar confusión en lo que debe y no debe aportar un equipo de protección. Por esta razón, la publicación de hoy dará los aspectos generales acerca de qué son, quién debe y puede usarlos, así como las normativas básicas que deben cumplir estos equipos para que puedan ser considerados EPI, Equipos de Protección Individual.
Aunque este virus ha tomado por sorpresa al mundo entero, el personal sanitario y los médicos deben estar siempre preparados para cualquier tipo de situación. Tener su equipo de protección en perfectas condiciones nunca había sido tan necesario, especialmente por lo contagioso de este virus.
No solamente el personal sanitario y los médicos deben contar con estas medidas de protección, también las personas que trabajan en la manipulación de cadáveres y aquellas que están expuestas a riesgos biológicos o manipulación de muestras, deben portar el equipamiento necesario y seguir ciertas recomendaciones para evitar el contagio:
- Mantener la distancia entre 1 y 2 metros con el paciente o la muestra con la que se esté trabajando, siempre con mascarilla y guantes.
- Las mascarillas deben estar catalogadas como FFP2/ FFP3. Identificación de los materiales aptos para evitar contagios ambientales masivos.
- Contar con una bata y protección ocular.
Los Equipos de Protección Individual o EPI por su abreviación en castellano, son todos aquellos materiales que se utilizan para la protección de la salud de los trabajadores. Son instrumentos que protegen contra cualquier riesgo que pueda atentar contra la salud o la integridad física.
Aunque exista una variedad muy amplia de EPI disponibles en el mercado y cada uno tendrá características que lo hacen único en su funcionamiento, a continuación, se presenta un listado de los aspectos que comparten entre sí estos dispositivos de protección:
- Deben ajustarse a las condiciones de trabajo
Condiciones entendidas como temperaturas de exposición del entorno; humedad, calor, frío, alturas, etc.
- Responder a las necesidades físicas de quien lo usa
Los equipos bajo ninguna circunstancia deben limitar el desempeño de las funciones ni las capacidades visuales, auditivas o motrices.
- Estar hechos de materiales ligeros y compatibles al contacto con la piel
Sobre todo, deben estar desarrollados para ofrecer además de seguridad, comodidad a quien los usa.
- Ser compatibles entre sí
En caso de usar varios EPI a la vez, porque la situación lo amerita. Es necesario que estos equipos sean compatibles entre sí, al igual que si se utilizan de manera individual. Deben ofrecer exactamente la misma de protección.
- Contar con una vida útil determinada
Cada equipo, tiene un máximo de utilización, dependerá de su tipología y correcta implementación siguiendo las instrucciones.
- Es de uso exclusivo sanitario
Como se mencionó anteriormente, solo las personas que se encuentran ante un riesgo inminente deben utilizar este tipo de protección, la cual debe cumplir con certificaciones y sellos CE, así como con la señalización del organismo notificador.
Además de estas características, los EPI han de cumplir con una serie de protocolos y certificaciones de acuerdo con la legislación de cada país. Esto avalará su seguridad y confianza de uso.
Cada EPI trae un folleto informativo que debe detallar las siguientes especificaciones por parte del fabricante:
- Procedencia: Nombre y dirección del fabricante
- Instrucciones de uso, así como la debida higiene y desinfección del artículo
- Certificaciones de efectividad de uso
- Piezas adicionales en caso de ser requeridas
- Clasificación del EPI de acuerdo con el uso y nivel de riesgo
- Fecha de caducidad
- Embalaje apropiado para garantizar el transporte estéril
- Información clara y detallada sobre el elemento en el idioma del país.
Aunque existen más especificaciones. Dependerá de cada país y su legislación, aplicarlas a este tipo de materiales.
Hoy en día hay EPI para todo el cuerpo, pero los que mayormente se usan son aquellos que se enfocan en la protección de ojos, oídos, cara, vías respiratorias, piernas, pies, abdomen y tronco, clasificándose según su riesgo:
- Categoría I: Riesgo Menor
Estos equipos no necesariamente cumplen con el sello CE y dentro de esta categoría se encuentran, por ejemplo: guantes de jardinería y limpieza.
- Categoría II: Riesgo Intermedio
Para este grupo de materiales se exige la marca de examen CE y comprende una amplia gama de artículos. Equipos para manos, brazos, piernas y pies. Así como cascos y máscaras protectoras (muy populares durante el covid-19).
- Categoría III: Riesgo grave
Como su categoría lo indica, deben proteger contra todos los riesgos mortales, además de superar el examen CE. Son equipos muy específicos y complejos. Pueden comprender desde la protección en alturas hasta cualquier aspersión de partículas diminutas (como un aerosol).
Como se ha visto a lo largo de esta publicación los EPI son muy importantes no solo para los equipos médicos sino para todo el mundo, ya que garantizan seguridad y protección a quien los usa.
Es importante recordar, que estos equipos siempre deben estar homologados, en perfectas condiciones (nuevos) antes de su utilización y han de cumplir con las respectivas especificaciones que garanticen su funcionalidad.
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