Una persona invidente camina por la calle. Gracias a un dispositivo especial, una voz robótica empieza a hablar desde su móvil: “Artesanía Medina. Tienda de regalos. Cuidado, pequeño escalón. El mostrador a la izquierda”. Con esta tecnología las ciudades ahora son más visibles para aquellos que tienen una discapacidad visual, gracias a empresas como Outbarriers. La iniciativa nació en Granada, donde han instalado balizas con información útil para los que no pueden ver en más de 100 comercios.
¿Y si la voz que da toda esa información, en vez de ser la de una máquina, la pusieran locutores ciegos? Fátima Aguilera, periodista y locutora profesional, es la precursora de esta idea tan innovadora. Nos cuenta cómo en el instituto conoció a su amigo Óscar, que aunque no podía ver, su sueño era ser locutor de radio. “Siempre he pensado que estas personas pueden ser muy buenas en este mundo, ya que al faltarles la vista, desarrollan mucho más otros sentidos como el oído”, comenta.
“Cuando conocí el proyecto de Outbarriers pensé que los ciegos podrían tener una oportunidad real de trabajo a través de esta empresa, pero claro, antes había que formarlos como locutores profesionales”, explica mientras nos enseña algunos textos publicitarios con los que trabajarán, que va a enviar a la ONCE, otro de los colaboradores, para que los pase a braille. En locución muchas veces se utiliza la imagen audiovisual como referencia. Como estas personas no la tienen, Fátima trabajará estimulándoles los sentidos, intentando que mediante el gusto, el tacto y el olfato ellos sean capaces de reconocer los sentimientos que en ese momento sugiere el texto. Fátima nos explica que para enseñar a locutar a una persona invidente es fundamental que el docente se ponga en la misma situación. Por eso, se tapará los ojos con una venda mientras el alumno permanezca en el atril: “Tengo que sentirme como ellos, así podré conseguir que sean capaces de dar lo máximo de cada uno”, dice.
El taller de 12 horas es gratuito, se impartirá todos los sábados del 14 de enero al 4 de febrero de 2017 en la sede de Escuela Luisa Ezquerra de Granada:“La satisfacción personal de hacer esta actividad es plena. Lo hago por Óscar y por todas las personas que están en su misma situación”, cuenta Fátima emocionada. Por supuesto su amigo Óscar asistirá al taller y comenzará así a hacer realidad un sueño, que, si todo va bien, culminará dentro de poco, con la creación de una radio hecha por personas con discapacidad visual.
