La cocina es una de las piezas más importantes de la casa, en ella pasamos gran cantidad de tiempo y sobre todo realizamos una de las funciones principales de la vivienda: almacenar y preparar los alimentos que nos permiten llevar una vida sana. Este post te dará 4 consejos básicos para lograr que la cocina sea un lugar para disfrutar cocinando.
1. Comienza el diseño tomando datos de quién y cómo se va a usar la cocina.
Antes de ponernos a dibujar una línea debemos tener claros los gustos, las prioridades y el modo de vida de nuestro cliente. Para ello es necesario tener preparada una batería de preguntas sobre cómo se utilizará y qué se necesita de ese espacio. Céntrate en:
· ¿Cuántas personas van a utilizar la cocina y cuál es la función de cada una?
· ¿Qué utensilios de cocina tiene ya el cliente, o qué electrodomésticos quiere aprovechar?
· ¿Cuáles son sus gustos estéticos?
· ¿Qué tipo de cocina realiza?
· ¿Cómo hace la compra, qué compra y con qué frecuencia?
2. Ten claro el triángulo de trabajo y adapta la distribución para que sea lo más cómoda posible
El objetivo del diseño de la cocina es lograr un espacio útil para las funciones que en ella se van a realizar, minimizando los recorridos entre las zonas de trabajo. Hay tres zonas principales en la cocina: la zona para cocinar, la zona de lavado y la zona de preparación. Lo ideal es situar la zona de preparación de manera que sea accesible tanto desde la zona de lavado como de la de cocción. Es decir, entre el fregadero y la placa de cocción debe haber una amplia superficie para que podamos preparar y lavar los elementos a cocinar.
3. Elige una buena altura para la encimera de cocina y ten en cuenta los espacios de circulación
Lo primero que tenemos que definir en una cocina es la cota de nivel de la encimera, que deberá adaptarse a la altura del usuario. Lo más habitual es una altura de encimera de unos 90 cm y una profundidad de entre 60 y 70 cm. Para facilitar la aproximación a la encimera, es conveniente que el zócalo de los muebles bajos se retrase unos 7 cm.
Si optas por la colocación de una isla, las encimeras deben estar entre 80 y 100 cm de ésta.
4. Elige bien el mobiliario, pensando más en un correcto almacenaje que en la estética
La cocina es uno de los espacios de almacenaje más importantes de la casa y es esencial distribuirlo de manera adecuada para conseguir una cocina útil y acogedora. Tenemos tres tipologías de muebles de almacenaje:
· Muebles bajos.- ubicados bajo encimera, suelen utilizarse para utensilios de cocina grandes, cubertería, despensa de patatas, cebollas, ajos, fruta, verduras, cubos de basura, utensilios de limpieza, etc. En el caso de utilizarlos para despensa de productos frescos o para basuras debemos tener en cuenta una buena ventilación, posiblemente a través del zócalo.
· Muebles altos.- situados a 50 cm sobre la encimera, especialmente indicados para la vajilla, la cristalería y el almacenaje de conservas.
· Muebles columna.- situados junto a la encimera o en otros espacios de la cocina sin encimera. En ellos suele ubicarse el horno y el microondas. Están especialmente indicados para almacenaje de productos de limpieza, utensilios grandes de cocina y conservas.
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