Certificados de Profesionalidad: la formación se convierte en empleo

Según datos recientes del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, hasta un 50% de las personas que cursan un Certificado de Profesionalidad consiguen trabajo el primer año, y hasta un 70% consigue entrar en el mundo laboral durante el segundo año. Más de 2 millones de personas son clientes potenciales de cursos que preparan para la obtención de este tipo de certificados.

Los Certificados de Profesionalidad, establecidos en el Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales, acreditan, según el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), el conjunto de competencias profesionales que capacitan para el desarrollo de una actividad laboral identificable en el sistema productivo.

Las distintas vías de acreditación son:

• Formal. Implica estudiar los contenidos de manera teórico-práctica durante unos meses, en los que se realizan actividades, se aprueba la evaluación online o presencial y se hace, finalmente, el módulo de prácticas en caso de que éste exista.

• No formal. Esta vía está destinada a aquellas personas que ya tiene una experiencia profesional previa. En este caso, un evaluador orienta en primer lugar. En segundo, evalúa, y después propone que se le conceda el título de Certificado. Si le faltara alguna parte concreta de las pruebas, el alumno podría examinarse únicamente de esa. El módulo de prácticas, por lo general, no haría falta.

Entre las  características principales de un Certificado de profesionalidad cabe destacar:

1. Acreditación. Tienen carácter oficial y validez en todo el territorio nacional.
2. Precio. Posiblemente es más asequible que una formación de alto nivel para la duración que exigen.
3. Empleabilidad. Puede considerarse, en la práctica, un «mini-máster» o un carnet profesional reconocido por el mercado laboral.
4. Flexibilidad. Se puede realizar por módulos hasta acceder a completar el Certificado de Profesionalidad completo. Además, se puede optar por distintas modalidades según el Certificado (presencial, semipresencial u online)
5. Habilitación. En muchos sectores será habilitante. Es decir, no se podrán desempeñar algunas profesiones o actividades sin el certificado correspondiente.
6. Guiados. Se trata de un itinerario de varios módulos y unidades formativas, conforme a un orden de realización lógico y que puede ser continuo o discontinuo.
7. Calidad. Se ajusta a unos estándares marcados, exámenes presenciales en todas las modalidades y supervisión por parte de la entidad competente.
8. Practicidad. La formación está eminentemente orientada al “aprender haciendo”, y debe incluir también un módulo de prácticas en empresas.
9. Variedad. Actualmente existen un total de 587 Certificados de Profesionalidad correspondientes a 26 familias profesionales dentro del Repertorio Nacional de Certificados, de los cuales se han aprobado 583.
10. Europa. Contribuye al Europass, compuesto por 5 documentos para la búsqueda de empleo en Europa (CV, Pasaporte de Lenguas, documento de Movilidad Europass, Suplemento al Título Técnico y Suplemento al Título Superior).

Este sistema, desarrollado bajo el paraguas del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, es paralelo al del Ministerio de Educación y la formación profesional tradicional. Además, ambos tipos de formación son complementarias entre sí.

Eugenio Gallego, Director de Formación Privada y Desarrollo de Negocio de ADAMS Formación.

Manuel Pereira, Director de Empresas e Internacionalización de ADAMS Formación.