La disciplina del coaching, como profesión transversal y de carácter holístico, tiende a integrar novedosas técnicas de diferentes campos. Por eso, era cuestión de tiempo que la programación neurolingüística, la inteligencia emocional y el coaching se unieran para reforzar los procesos de desarrollo y crecimiento de las personas. Escuelas de negocios como INESEM Business School han incluido esta nueva tendencia en su Master en Coaching online. También se trata de un tema que está presente en otros master online del catálogo pues la asistencia al desarrollo personal y profesional es ya una realidad afianzada en el mercado laboral.
La inteligencia emocional, un concepto importado de la psicología, se incorpora para analizar y modificar las conductas nocivas de las personas, en aras de alcanzar los objetivos marcados. Asimismo, un buen coach necesita dominar su inteligencia emocional para actuar como líder y consejero, entendiendo lo que su coachee necesita en cada momento. El cultivo de la inteligencia emocional es la base para establecer una relación estrecha y de confianza, fundamental para que el proceso de coaching llegue a buen puerto.
Además, la noción de Inteligencia Emocional está trascendiendo del individuo para integrarse en el vocabulario empresarial. Las organizaciones empiezan a valorar el clima emocional entre sus empleados, el potenciar las habilidades personales de cada uno y otros conceptos más allá de productividad, horarios e informes. Los estudios sobre eficacia son concluyentes: los trabajadores más productivos son aquellos que saben controlar sus emociones, motivados, entusiastas y con habilidades para el trabajo en equipo.
Por su parte, la Programación Neurolingüística se ha aplicado en numerosos campos como la gestión empresarial, el marketing, el deporte, la docencia y también, por supuesto, en el coaching. PNL y coaching guardan una íntima relación, ya que muchas de las técnicas básicas del coaching beben directamente de la PNL. Como disciplinas separadas se complementan a la perfección ya q
ue mientras el coaching determina qué hacer para alcanzar el éxito, la PNL se centra en cómo hacerlo de manera óptima. Así, su interactuación genera una experiencia de aprendizaje en bucle.
La interactuación de las tres disciplinas está modificando la manera de entender los procesos de coaching y dotando a los profesionales de este campo de nuevas herramientas. El coach trabaja con una materia prima delicada: las personas, sus sueños y sus aspiraciones; de modo que casi podríamos decir que por cada persona hay una técnica diferente. El éxito del coach está en que el coachee alcance sus metas.
