El dominio de idiomas es un factor clave en la búsqueda de empleo en una sociedad tan globalizada como la actual. Antes, el inglés era el instrumento capaz de destacar al candidato a cualquier oferta de empleo. Ahora el inglés se ha convertido en una habilidad de base para acceder a cualquier candidatura. Si no se domina esta lengua, las probabilidades de que la persona consiga el puesto que desea descienden considerablemente. La lengua materna y el inglés prácticamente se equiparan.
Además, la apertura de nuevos mercados ha hecho que el abanico de idiomas que determinado sector puede demandar se expanda de manera notable. El dato sectorial es importante ya que, por ejemplo, las lenguas importantes para los ingenieros de telecomunicaciones pueden no ser las mismas que para los expertos en marketing o en ciencias políticas.
El ámbito financiero es uno de los que más se ha abierto en cuanto al tema de los idiomas. Los nuevos mercados, como el de China, Oriente Próximo o Singapur, se unen a los clásicos, como el de Reino Unido o Estados Unidos.
Siguiendo esta tendencia, te presentamos los idiomas que pueden ayudar al candidato a conseguir un empleo en este sector.
–Inglés: como se ha comentado anteriormente, es el idioma por excelencia, presente en todos los currículums (aunque sea en ese nivel medio-alto que denota cierta ambigüedad). No sólo es útil para las ofertas provenientes de países anglosajones, sino que, como se trata de una lingua franca, puede servir para comunicarse en muchos países cuya lengua principal sea otra.
–Chino: la progresiva entrada de China en el sistema capitalista ha pillado a muchos profesionales por sorpresa. Por eso, aprender chino de manera más o menos rápida (no es el idioma más fácil de aprender para un hispanohablante) puede ser una gran ventaja para un profesional del ámbito financiero. Durante 2014, los inversores extranjeros decidieron comprar acciones chinas por primera vez, lo que desmuestra una confianza sólida en su mercado. Esta movida posiblemente vaya de la mano con una apertura a la contratación de nuevos profesionales.
–Ruso: el mercado ruso es otro al que no hay que perder de vista. Sumado al hecho de que el conocimiento del inglés no está muy extendido en el país, tener conocimientos de su idioma nacional es, indudablemente, una ayuda muy importante desde el punto de vista profesional. Durante el 2014, el potencial de la Federación Rusa dentro del mercado ha descendido, en parte por la caída del petróleo y otros de sus valores, pero ese tipo de oscilaciones son habituales en el sector financiero, así que no hay que descartar Rusia como un posible destino profesional.
–Árabe: su riqueza en petróleo hace que el comportamiento de las bolsas de Oriente Próximo sea generalmente positivo. Conseguir un puesto dentro del ámbito de las finanzas en Dubai o Qátar puede ser un gran triunfo profesional y además no es una fantasía inalcanzable. Con una buena formación y el dominio de la lengua, un profesional puede hacerse hueco en este mercado laboral (que trae consigo buenas remuneraciones).
Me interesa inglés