El plan Bolonia ha provocado que los exámenes finales de toda la vida pasen a estar en un segundo plano. De hecho, la evaluación continua está ganando terreno en casi todas las facultades. Sin embargo, algunas universidades todavía ofrecen la posibilidad de acogerse a la evaluación única, es decir, de jugárselo todo a una sola carta. Esta opción puede ser muy útil para las personas que no pueden asistir regularmente a clase, pero también presenta algunos inconvenientes. Por ejemplo, la acumulación de trabajo o el riesgo de abandonar a última hora.
¿Cómo se puede estar al día sin tener que entregar trabajos cada semana? ¿Qué estrategias hay que seguir si decidimos hacer un examen final? En este post, te presentamos 10 consejos para que huyas del estrés y te presentes a las evaluaciones pisando fuerte. No olvides que nos puedes hacer llegar cualquier duda o sugerencia en un comentario. ¿Cuándo empiezas a prepararte?
10 ideas para superar con éxito la evaluación única
- No pierdas el hilo del curso. Aunque te lo juegues todo a una carta, procura seguir el desarrollo del curso y estar al día sobre los contenidos que se imparten.
- Planifícate dentro de tus posibilidades. Que solo tengas que realizar un examen no significa que no puedas marcarte pequeños objetivos cada semana. Te ayudará a no tener que estudiar todo el temario de golpe.
- Avisa a tus profesores. En algunas universidades, optar por la evaluación única implica renunciar a la evaluación continuada. Si tu profesor pone como prioridad la evaluación continua, comunícale tus intenciones y plantéale todas tus dudas.
- Mantén la comunicación con tus compañeros. Estar en contacto con los compañeros que siguen la evaluación continuada te ayudará a tener información sobre los contenidos más relevantes del curso.
- Consulta el modelo de examen. El examen único suele tener una estructura distinta a las pruebas de evaluación continua. Pide a tu profesor que te facilite un modelo de ejemplo.
- No lo dejes todo para última hora. Acumular todo el trabajo en las semanas previas al examen puede provocar estrés y ansiedad. Intenta avanzar durante todo el semestre.
- Haz pequeños descansos durante el estudio. El estudio intensivo favorece la rigidez muscular y el dolor de cabeza si no se hacen pausas breves. No lo olvides: la salud es clave.
- Controla el tiempo que dedicas a cada pregunta. Incluir todo el temario en un solo examen es imposible. Por lo tanto, intenta sintetizar y dar respuestas equilibradas.
- Cuida la alimentación y el ocio. Comer bien y divertirse favorece el rendimiento académico. ¡Desconectar también ayuda a avanzar!
- Haz balance de los resultados obtenidos. Analiza qué ha salido bien y qué ha fallado para tenerlo en cuenta la próxima vez. La autocrítica siempre es necesaria.
