Seguro que alguna vez habrás creado una palabra un poco absurda para memorizar algo juntando las iniciales de varias palabras. Algo muy típico en época de exámenes. Nada más lejos de la realidad, la mnemotecnia es, según la RAE, un procedimiento de asociación mental para facilitar el recuerdo de algo. Sin embargo, la mnemotecnia engloba tácticas diferentes según la naturaleza o el ámbito de memorización de que se trate. Luis Sebastián en su ‘Breve manual de mnemotecnia’ explica diferentes técnicas para memorizar. Aquí van las principales.
1. Método de la cadena
Por ejemplo, para memorizar una lista de palabras, que no tienen por qué estar relacionadas entre sí, Sebastián aconseja imaginar escenas en las que cada palabra u objeto interactúa con la siguiente. De este modo, imaginaremos una historia que nos facilitará el recuerdo de las palabras.
2. Método ‘loci’ o de los lugares
Por ejemplo, si también tienes que memorizar una lista de palabras, fíjate en los objetos que tengas en el salón de tu casa o en la habitación en la que te encuentres, y ve asociando cada objeto que estés viendo a cada uno de los términos a memorizar. En este caso también has de imaginar escenas con ambas palabras. Un ejemplo podría ser imaginarnos nuestro armario como una puerta secreta hacia un jardín (palabra a memorizar) y así con el resto de palabras.
De esta forma, al repasar e ir mirando los objetos de nuestra habitación, nos irán evocando a las palabras que queríamos recordar. Eso sí, Sebastián aconseja utilizar como referencia un espacio que conozcas bien. Si tienes que memorizar varias listas de palabras, puedes situar cada una de ellas en un espacio: el salón, tu habitación, el baño etc. El ejemplo de las habitaciones del hogar es la variante más sencilla de este método porque es lo que mejor conocemos, pero podríamos hacer lo mismo con calles.
3. El abecedario ilustrado
Consiste en asociar cada letra del abecedario con un objeto o animal que comience por esa misma letra. Por ejemplo, a de abeja, b de burro, c de casa, d de dedo etc. Después imaginaremos una escena que relacione cada una de las palabras a recordar con el objeto que representa a cada letra del abecedario.
4. Con los números
Tienes que escoger un objeto que represente a cada número. Un ejemplo: 1- columna, 2-pato, 3-tridente etc. Objetos que por su forma u ortografía recuerden al número en cuestión. Luego, ya con la lista de palabras que tienes que memorizar, vas relacionando la primera palabra con el número uno, la segunda con el dos y así sucesivamente. Como de costumbre, ahora imaginarás escenas con ambas palabras y tendrás que empezar a contar para ir enumerando el listado de palabras.
5. El código fonético
La cosa se va complicando. ¿Y si ahora tienes que memorizar uno o varios números largos, como 879654?. El sistema del código fonético consiste en relacionar cada número con una serie de consonantes con las que podrás formar una palabra. Las vocales te servirán de relleno para formar la palabra. La letra y no se utiliza por tener la misma pronunciación que la i. La h tampoco nos sirve porque es una consonante muda. Primero deberás establecer qué consonantes asocias a cada número. Te resultará más fácil si intentas encontrar alguna similitud entre la letra y el número.
Bien interesante!