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5 habilidades educativas que puedes potenciar haciendo una escape room

escape room

¿Te gustaría resolver enigmas encerado en una habitación con un grupo de amigos? Si es así, estás de suerte, porque las escape room están más de moda que nunca. Estos juegos de aventuras (físicas y mentales) consisten en confinar a un grupo de personas para que resuelvan un conflicto trabajando en equipo. Los jugadores deben relacionar pistas y escapar de la habitación antes de que pase el tiempo límite, normalmente unos 60 minutos. Como debes de imaginar, las escape room se han convertido en una nueva forma de ocio, pero también pueden tener aplicaciones en el ámbito educativo. Por ejemplo, ayudan a potenciar habilidades básicas para el éxito académico y laboral. En este post, te explicamos qué aptitudes se trabajan durante una escape room y cómo aprovecharlo.

Si quieres mejorar tu rendimiento académico pero piensas que este tipo de actividades no está hecho para ti, te advertimos de que no hay excusa. Las escape room son temáticas, por lo que pueden ambientarse en cualquier espacio: desde una nave espacial o un búnker militar hasta una casa encantada o un despacho escolar. De hecho, incluso existen habitaciones pensadas para fans de series. Normalmente, se trata de series de suspense o aventuras, pero cada vez se están ampliando más las posibilidades: ¡creatividad al poder! Y tú, ¿has participado alguna vez en una escape room? ¿Cómo valoras la experiencia? ¡No esperes más y mejora tus habilidades educativas en un entorno de ocio!

Tipos de formación que te ayudarán en la realización de un escape room:

5 habilidades educativas que mejoran con una escape room

  1. Trabajo en equipo. Los retos que se plantean en este tipo de juego están pensados para ser resueltos en equipo. Así pues, cada participante adquiere unos determinados roles y asume unas determinadas tareas. En este sentido, es fundamental la comunicación entre los miembros del equipo. Intentad compartir ideas y posibles soluciones sin caer en conflictos. Y si hay conflictos, procurad resolverlos rápido.
  2. Imaginación. ¿Has soñado alguna vez con ser protagonista de una novela? Si la respuesta es afirmativa, estás de enhorabuena. Esta experiencia lúdica te permite vivir como si fueras un personaje de ciencia ficción. Intenta actuar como si estuvieras en su piel y pensar cuál es la mejor manera de resolver el juego.
  3. Concentración. Concentrarse es fundamental para resolver el reto con éxito. No solo porque el tiempo corre muy rápido, sino porque cualquier despiste al leer las instrucciones puede provocar que fracasemos. En otras palabras, antes de empezar infórmate bien sobre la situación que tienes por delante: tipo de misión, antecedentes previos, pistas disponibles, acertijos a resolver, etc.
  4. Cálculo y lógica. Muchos acertijos a resolver están relacionados con el cálculo matemático. Es decir, deberás aplicar todo lo que aprendiste en la escuela sin posibilidad de sacar los apuntes. Por otra parte, hay que tener en cuenta que todas las pistas o pruebas a resolver se basan en el razonamiento y la lógica. Si no fuera así, salir o no de la habitación se convertiría en un hecho totalmente arbitrario. Intenta pensar con la cabeza fría y no ponerte nervioso.
  5. Trabajo bajo presión. Uno de los principales alicientes del juego es la pugna con el tiempo. Desde el momento en el que entramos en la sala, empieza la cuenta atrás. Así pues, conviene ser resolutivo y ceder responsabilidades a los compañeros para no bloquearnos con pequeños detalles.

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