Nada más y nada menos que una caída de 9.000 millones de dólares. Sí, parece que esos números son impensables, pero Apple ha confirmado que sus nuevos iPhone no se están vendiendo como ellos esperaban.
La alarma llegó cuando, de forma sorpresa, Apple suspendió las actividades en bolsa. En ese momento, Tim Cook, CEO de la compañía, emitió un comunicado en el que aseguraba que las ganancias del último trimestre del último año no se habían llegado a cumplir.
Desde la compañía se asegura que la fortaleza del dólar está teniendo mucho que ver. Además, el hecho de que se lanzaran los iPhone XS y XS Max en un trimestre y, el lanzamiento del iPhone X en otro, puede hacer que las ventas se hayan ‘repartido’ de alguna forma y que, por tanto, se hayan visto dañadas las cifras en este último trimestre del año.
Será el próximo día 29 de enero cuando Apple dará todos y cada uno de los detalles del último trimestre del 2018 y también del resto del año.
