Aprender no debe ser siempre aburrido. Como decía el profesor Johan Huizinga, el ser humano es un hombre que juega, un homo ludens, puesto que el acto de jugar es consustancial a la cultura y naturaleza humanas. Es precisamente durante la infancia cuando somos más receptivos a los estímulos musicales y absorbemos mejor las experiencias y conocimientos. Está comprobado que el aprendizaje de la música mejora las capacidades cognitivas del niño. Además, este proceso resulta más divertido, fácil y sencillo. Así pues, no es de extrañar que el colegio Padre Enrique de Ossó, en Zaragoza, use la música para asumir conceptos matemáticos abstractos. En concreto, los alumnos de tercero de primaria de esta escuela aragonesa han aprendido formas básicas de geometría cantando una canción de rap.
La escuela ha publicado este vídeo, que se ha hecho viral en Internet y que ya ha superado las sesenta mil reproducciones. En él se puede ver a los niños cantando “Recto, agudo, obtuso y llano. Paralelas, paralelas. Secantes, secantes. Perpendiculares, perpendiculares”. También podemos leer frases como “¡Si la lección es divertida, nunca se olvida!” y “¡Combina la inteligencia matemática y musical!”. Parece ser que, a partir de ahora, la escuela usará esta técnica de trabajo para atraer la atención de los alumnos. ¿El objetivo? Que se interesen por las lecciones de matemáticas y de otras materias. En Emagister aplaudimos la iniciativa y animamos a otras escuelas a imitar a este centro zaragozano.
Rap en el aula: ¿qué nos enseña esta iniciativa del colegio zaragozano?
- La multidisciplinariedad, un factor clave en el aprendizaje. La formación en cualquier edad, pero sobre todo en la más temprana, tiene que abarcar todo el abanico de habilidades. Solo de esta manera los niños desarrollarán todas sus capacidades. Por esta razón es esencial establecer un currículum de carácter humanístico, que abrace desde las ciencias a la formación musical. Si, además, estas materias se mezclan y se estudian a la vez, de manera que se apoyan mutuamente, conseguimos potenciar exponencialmente el aprendizaje.
- Armonizar lo nuevo con lo tradicional es esencial. ¿Cuántas veces hemos tenido que aguantar las clases del típico profesor aburrido para quien incluso la tele en blanco y negro ya era una tecnología demasiado nueva que amenazaba con destruir la sociedad occidental? Es evidente que, si queremos que los alumnos se interesen por lo que explicamos, tenemos que hacer el esfuerzo por conocer sus gustos y hablar un lenguaje que ellos entiendan. Solo si se sienten interpelados, tendrán ganas de escuchar y aprender las materias que les queremos explicar.
- Las nuevas tecnologías han llegado para quedarse. Además de hablar un lenguaje que los niños entiendan, es esencial usar las tecnologías que ellos, desde bebés, han tenido entre sus manos. La experiencia de esta escuela nos demuestra el gran potencial que tiene el uso activo de Youtube para grabar y publicar vídeos. De esta manera, no solamente los alumnos de tercero de primaria han aprendido las formas geométricas básicas, ¡sino que el colegio se ha dado a conocer por todo el mundo!
Fuente: La Sexta
