Este post tiene como propósito dar los mejores consejos para mejorar el sueño del bebé, si estás a punto de tener un hijo o tienes un recién nacido, a continuación conocerás los secretos para que tenga un buen descanso. Además, si quieres especializarte en el ámbito de la psicología juvenil puedes realizar el Máster en Psicología Infantil y Juvenil, este programa está diseñado por expertos y conocerás temas relacionados con los trastornos del sueño y cómo tratarlos.
¿Qué contribuye en la calidad del sueño del bebé?
Esta es una pregunta frecuente entre padres que están iniciando esta etapa y desean mejorar la calidad del sueño de su pequeño. Toma nota a los siguientes consejos:
- Posición: es un factor muy importante a la hora de dormir, se recomienda que siempre sea boca arriba, pues mejorará notablemente su respiración y disminuye el riesgo de asfixia.
- Ropa adecuada: el bebé debe dormir con ropa cómoda, prendas como gorros o bufandas que le aporten peso extra a la cabeza no son recomendables, pues no favorecen la conciliación del sueño y le restan calidad.
- Hábitos durante el embarazo: este consejo se enfoca en las madres, porque está comprobado que el consumo de tabaco, alcohol y medicamentos en exceso, altera de forma importante la calidad del sueño del bebé.
- Horarios: normalmente la regularización del sueño se produce a los 2 meses, pero todos los niños son diferentes y esto puede tardarse más. Si a los dos meses no se consigue establecer un horario de sueño, lo mejor es consultar con un pediatra.
En especial cuando se trata de padres primerizos, existen muchas dudas sobre si están actuando bien a la hora de ayudar a que el bebé se duerma. Por ello, te damos a conocer las mejores técnicas para dormir al bebé:
Fijar una rutina: funciona con adultos, pero también con bebés. Crear una rutina le permitirá entender que el día está dividido en etapas y cada una de ellas tiene una serie de acciones. Algo que se puede hacer y que funciona muy bien es decirle que es hora de dormir cuando llegue la noche y, cantarle una canción, leerle un cuento, darle un masaje, etc. Como resultado, se creará una atmósfera de relajación que le permitirá conciliar el sueño rápidamente.
Crea un ambiente de descanso: para contribuir a la calidad del sueño del bebé debes crear un ambiente propicio. Se recomienda que el cuarto del pequeño tenga luz tenue que favorezca el sueño. La temperatura también juega un papel importante, debe estar entre (18 ºC y 21 ºC), otro factor a tener en cuenta son los sonidos, de esto depende que se altere o que se tranquilice. Desde la gestación el bebé escucha sonidos que posteriormente relacionará con estados de bienestar y le ayudarán a dormir mejor.
Control de siestas: en último lugar, pero no menos importante, debemos decir que controlar el número y duración de siestas durante el día, beneficia de forma directa su descanso en la noche. Se recomienda que las siestas no superen las 2 horas y media para no alterar el ciclo de sueño del bebé.
¿Cuánto debe dormir el bebé?
Los niños a medida que crecen van disminuyendo las horas de sueño de manera gradual. Así, los bebés de 0 a 2 meses suelen dormir entre 16 a 20 horas al día, de las cuales 6 u 8 son en la noche. Como decíamos, esa cantidad se va disminuyendo progresivamente.
En el caso de los bebés de 3 a 6 meses, suelen dormir entre 14 a 16 horas al día, de las cuales 8 a 10 son nocturnas. A partir de los 10 meses y hasta el primer año de edad, suelen dormir 11 horas nocturnas combinadas con 1 o 2 siestas de media hora. Por último, a partir de los 2 años las siestas se reducen o desaparecen y, entre los 3 y 5 años de edad se estabilizan las horas totales de sueño a 10 o 12 horas nocturnas, sin siestas.
¿Cómo afecta el sueño de los bebés la etapa de confinamiento?
Es una preocupación frecuente por estos días y es absolutamente normal. Si a los adultos el confinamiento nos alteró de alguna manera nuestros ciclos de sueño, es claro que a los niños también. En estos casos se recomienda, como lo hemos dicho antes, establecer una rutina para que el niño siente de alguna manera que la vida cotidiana sigue, eso sí, enfocándose en mantener las rutinas de sueño intactas. Hay que tomar en cuenta factores como la edad, porque al no poder jugar, interactuar con amigos o ir al cole, es normal que tengan exceso de energía y, por ende, no quieran dormir. Se recomienda planear actividades durante el día que hagan que se canse y así podrán dormir en la noche, también se recomienda evitar el consumo de bebidas azucaradas antes de dormir y dejar a un lado dispositivos electrónicos 1 hora antes de ir a la cama.
Esperamos que después de leer este post tengas más claro cómo es el sueño del bebé en diferentes etapas y que puedas ayudarles a mejorarlo. Te recomendamos que pongas en práctica alguno de nuestros consejos y notarás resultados positivos cuanto antes. Recuerda que cada niño es diferente y si el problema empeora lo mejor es contactar con un profesional.
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