No es una novedad que desde el brote mundial del coronavirus en marzo pasado, todos nos hemos visto obligados a adaptar nuestro día a día y la manera cómo consumimos, socializamos, y hasta cómo nos educamos, de modo que podamos estar en un entorno más seguro y evitar los riesgos de contagio y propagación del virus.
Sin lugar a dudas, esto se ve reflejado en la manera cómo nos relacionamos. Como punto a favor, la distancia con nuestros seres queridos, familiares y amigos se ha podido acortar significativamente gracias a un crecimiento del uso de aplicaciones móviles para realizar video llamadas, transformándose en un instrumento vital para mantener el contacto. El uso de las redes sociales en España ha aumentado un 55% durante el coronavirus y el confinamiento. Esta tendencia luego ha sido llevada también al sector laboral donde las reuniones físicas de equipos se han trasladado a salas virtuales.
Lo que pone en evidencia la manera en que el sector laboral y el educativo han tenido que mutar obligatoriamente y adaptarse al entorno digital para sobrevivir y no quedarse atrás. Por ejemplo, vemos cómo las consultas médicas, el trato de las entidades financieras con sus clientes, los diferentes servicios sociales, actividades de recreación, entre otros, se han visto obligados a dar un giro de 180 grados a sus estrategias y a su modus operandi, donde el respeto por la distancia social es el factor común entre todos ellos.
¿Cuál es el escenario post-Covid para el sector de la educación?
Precisamente estas restricciones con respecto al distanciamiento social han hecho que el sector educativo agilice su renovación. Este sector particularmente llevaba una renovación a paso muy lento, manteniendo la misma metodología por varias generaciones llevando a cabo únicamente ligeros cambios. Sin embargo, en los últimos años ha sido inevitable continuar de esta manera y hemos sido testigos de una inclinación de la tendencia por digitalizar procesos y metodologías. Con el brote de la pandemia mundial de este 2020, este cambio se ha acelerado.
Y este cambio no ha pasado desapercibido por los expertos. Ramón Olano, consejero delegado de Alqua (Consultora de Estrategias y Operaciones) proyecta que “los cambios promovidos por la digitalización tanto en los procesos logísticos, como en los de gestión, comunicación y los servicios de formación, empujan al sector educativo hacia una transformación histórica”.
Entre los cambios llevados a cabo dentro del sector, se puede concluir que estos son los más notorios:
- Adaptación de modelos de enseñanza al espectro digital.
- Aumento de número de alumnos usuarios de plataformas digitales de educación.
- Los centros educativos se han visto obligados a apostar por innovación, especialización y tecnología.
- Acercamiento y mejora en la comunicación por parte de estas marcas con sus usuarios, por medio de redes sociales.
La realidad es que la enseñanza presenta un panorama muy diferente a como era antes del coronavirus. Los planes educativos y procesos de transformación no solo miran hacia la formación online, sino también a cómo ayudar a los estudiantes más vulnerables a no quedarse atrás por la brecha digital. Estos nuevos cambios afectan no solo a docentes pero también a alumnos aunque sean considerados “nativos digitales».
Instituciones como Banco Santander han llevado a cabo distintas iniciativas en este ámbito. La entidad bancaria ha creado una convocatoria de ayudas, el ´Fondo Supera COVID-19´ con la que ha destinado alrededor de 2 millones de euros para facilitar cerca de 5.000 ordenadores y 15.000 soluciones de conectividad a internet y webcams a jóvenes universitarios de toda España que se encuentran en una situación socioeconómica desfavorable. Asegurando que se pueda continuar con la educación remota durante el tiempo que las aulas permanezcan cerradas.
Auge de los marketplaces gracias al Covid:
Y es que incluso la forma de cómo consumimos e invertimos en nuestra educación ha cambiado. Según datos del Estudio Anual de eCommerce de IAB Spain, en España en 2020 han habido 2,2 millones de nuevos compradores online, siendo el e-learning el área más relevante y con más crecimiento.
Para mejorar la oferta, ha habido un aumento en la creación de cursos de bajo coste, lo que ha impulsado la conversión de la educación en un commodity. Emagister, al igual que Domestika, Coursera, Hello Creatividad, entre otras, son las plataformas que han sacado provecho de esta tendencia y han ampliado su abanico de ofertas. Centros y apps de idiomas también están en auge y con mayor número de suscriptores que años anteriores.
Como lo mencionamos anteriormente, también se prioriza mucho la experiencia de compra, la comunicación con el usuario y llevar a cabo prácticas que potencien la fidelidad de los usuarios, o en este caso, de los estudiantes inscritos a los cursos. Estos marketplaces tienen como objetivo aumentar aún más el engagement con su público a través de las redes sociales y la respuesta rápida, poniendo énfasis a estrategias 100% orgánicas.
Podemos concluir que en el sector educativo la digitalización pasó de ser una estrategia de innovación a una prioridad para la supervivencia. Sin embargo, es importante recalcar que esto no implica que las clases presenciales pasarán a ser completamente un tema del pasado, como mencionó en octubre pasado el secretario de Estado de Educación, Alejandro Tiana, “si se suple lo digital por lo presencial nos estaríamos equivocando”.
Siguiendo esta tendencia, Emagister ha ampliado su oferta educativa, disponible en su sitio web, donde además podrás comparar precios entre cursos, leer opiniones de usuarios y escoger entre las modalidades que más te convengan. ¿Qué esperas? Da click aquí y descubre toda nuestra oferta formativa.
