En el año 2020 la tasa de fertilidad, cayó a la mitad en los últimos 20 años (El País, 2020). Con esto hay que tener en cuenta el factor de la pandemia y de los numerosos problemas de salud con los que se encuentran las mujeres. En este artículo trataremos un poco en profundidad la cuestión de la fertilidad en la mujer del siglo XXI.
Etapas de la fertilidad femenina
La fertilidad, es decir, la capacidad de ser fértil y tener hijos es una cuestión que preocupa a muchas mujeres. Como menciona Herrera-Cuenca (2017), la época de la adolescencia es la que “marca el comienzo de la fertilidad”. Es ahí cuando las jóvenes se enfrentan a sus mayores cambios, tanto físicos como psicológicos. Cambios esenciales que las llevan a la vida adulta.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (2018), la edad reproductiva de las mujeres empieza a los 15 años, aproximadamente, y acaba alrededor de los 44 años. Estas edades están relacionadas con la primera menstruación y el inicio de la menopausia.
Durante la adolescencia aparecen los primeros ciclos menstruales. Estos son bastante irregulares, pero, generalmente, esa primera fase del ciclo dura unas dos semanas, aunque puede variar y ser de 7 a 21 días. Debido a esa irregularidad, “las alteraciones menstruales constituyen una de las causas más frecuentes de consulta ginecológica en adolescentes” (Montoya, et al., 2012).
Por este motivo, cabe aclarar que desde el punto de vista clínico hay tres factores a considerar en la normalidad de un ciclo menstrual según Montoya, et al. (2012):
- “La duración de cada ciclo”. Se considera un periodo normal cuando va desde los 2 a los 7 días, siendo la media de 4 días.
- “El intervalo entre cada ciclo”. En la mayoría de casos, varía entre los 26 a los 30 días, pero también es usual tener intervalos de entre 21 y hasta 35 días.
- “La cantidad del sangrado durante la menstruación”. Es el factor más complicado de medir, pero el volumen total no debería ser mayor de 80 ml.
Entrando en la etapa final de la edad fértil nos encontramos con la menopausia. La edad media en España en la que las mujeres la tienen por primera vez, es decir, cuando dejan de tener la menstruación, es alrededor de los 51 años. Esto no es un proceso que comienza de golpe, sino que, “años antes la función ovárica comienza a declinar”. Esto conlleva que los ciclos menstruales se alteren y haya periodos en los que los ovarios no producen óvulos. Desde que ocurre esto, hasta un año más tarde del último ciclo, es lo que se conoce como perimenopausia (Pavón de Paz, Alameda Hernando, y Olivar Roldán, 2006).
Principales problemas de fertilidad
La tasa de fertilidad, es decir, el número de hijos por mujer en edad fértil, ha bajado a la mitad y “se acerca al mínimo necesario para que la población total no disminuya” (El País, 2020). Y un papel importante es el de la infertilidad.
La infertilidad se puede definir como la incapacidad de quedarse embarazada tras un tiempo considerable (al menos un año) de relaciones sexuales sin métodos anticonceptivos de por medio. Es una condición que afecta aproximadamente al 15% de las parejas en edad reproductiva (Brugo, Chillik, y Kopelman, 2019).
Los principales factores que condicionan la fertilidad según González Rodríguez, et al. (2018) son:
- La edad avanzada de los progenitores.
- “Alteraciones en el aparato reproductor” o enfermedades como, por ejemplo: endometriosis, hipotiroidismo, el síndrome de ovario poliquístico…
- El estilo de vida juega un papel importante para la fertilidad de la mujer, ya que el consumo de alcohol, tabaco u otras drogas, las dietas poco equilibradas y sin aporte de nutrientes, el estrés y el sedentarismo influyen de forma negativa.
- También influyen “la exposición a contaminantes del medio ambiente”.
Para tener una vida fértil lo más saludable posible es necesario, sobre todo, cuidar la alimentación mediante la adquisición de hábitos saludables, hacer ejercicio de forma regular (según la edad tendrá que practicar un tipo de ejercicio u otro) y acudir a revisiones ginecológicas regulares.
Fuentes:
Brugo, S., Chillik, C., y Kopelman, S. (2019). Definición y causas de la infertilidad. Infertility: causes and definitions. Revista Colombiana De Obstetricia Y Ginecología, 54(4). Obtenido en http://www.scielo.org.co/pdf/rcog/v54n4/v54n4a03.pdf.
El País (2020). La tasa de fertilidad en el mundo cae a la mitad en 20 años. Obtenido en https://elpais.com/sociedad/2020-10-17/la-tasa-de-fertilidad-en-el-mundo-cae-a-la-mitad-en-20-anos.html.
González Rodríguez, L. G., et al. (2018). Nutrición y fertilidad. Nutricion hospitalaria, 35(SPE6), 7-10. Obtenido en http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S0212-16112018001200003&script=sci_arttext&tlng=en.
Herrera-Cuenca, M. (2017). Mujeres en edad fértil: Etapa crucial en la vida para el desarrollo óptimo de las futuras generaciones. In Anales venezolanos de nutrición (Vol. 30, No. 2). Obtenido en https://docs.bvsalud.org/biblioref/2019/10/1023558/art-5.pdf.
Montoya, J. S., et al. (2012). Alteraciones menstruales en adolescentes. Boletín médico del Hospital Infantil de México, 69(1), 63-76. Obtenido en https://www.medigraphic.com/pdfs/bmhim/hi-2012/hi121j.pdf.
Pavón de Paz, I., Alameda Hernando, C., y Olivar Roldán, J. (2006). Obesidad y menopausia. Nutrición Hospitalaria, 21(6), 633-637. Obtenido en http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0212-16112006000900001.
Organización Mundial de la Salud (2018). Salud de la mujer. Obtenido en https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/women-s-health.
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