La automatización industrial empieza a ser un concepto cada vez más sonada en nuestra época de la digitalización. Inteligencia Artificial, automatización y robótica industrial, comercio online… Las empresas que buscan sobrevivir al paso del tiempo se ven empujadas a adaptase a estos nuevos procesos.
¿Cuántos de vosotros habéis deseado que las tareas más pensadas las hiciera otro en vuestro lugar? Seguro que más de una persona se ha preguntado por qué una tarea de poco interés requiere tanto tiempo.
En el post de hoy queremos hablaros de aspectos positivos y negativos de la robotización industrial. ¿Nos sigues?
Pros y contras de la automatización industrial
En la mayoría de los casos, la introducción de la robótica en la industria ha llegado para solucionar este tipo de problemas, agilizar procesos que suponen un corto impacto que requieren una gran dedicación humana. En este sentido, la Inteligencia Artificial (IA) está trabajando para que así sea, es lo que se llama como la Cuarta Revolución Industrial.
Se trata de maquinaria robotizada que imita las funciones humanas. Se ha conseguido que las máquinas aprendan y resuelvan problemas por ellas mismas. Estos son los últimos avances de la IA, la cual trata de dotar a los robots capacidad para actuar por ellos mismo y, por lo tanto, encargarse de llevar a cabo una actividad, por muy aburrida y monótona que sea. No solo estas máquinas inteligentes son útiles para desempeñar este tipo de tareas, sino también para llevar a cabo tereas de riesgo.
De este modo, mientras el empleado puede dedicar su tiempo a otro tipo de tareas más significantes, el robot puede desempeñar las labores menos gustosas. Este tipo de procesos ha comportado que la productividad de los trabajadores aumente, pues están desempeñando un trabajo más agradable y gratificante. También ha ayudado a estimular su creatividad y participación.
Resultados positivos de la robotización
– Más eficacia en las cadenas de producción
– Ahorro en el tiempo invertido para la fabricación de productos
– Economizar el gasto
– Menos errores y por tanto, menos desperdicios
– Más calidad
– Flexibilidad en la producción
– Mayor eficiencia energética
– Menos riesgos laborales
Impacto negativo de la automatización industrial
Según los últimos datos de la Federación Internacional de Robótica revelan que la venta de máquinas inteligentes para la industria se ha duplicado en los últimos cinco años en todo el mundo.
Las ventas de robots industriales es un tema que preocupa, sobre todo a trabajadores. Ven en peligro su lugar de trabajo. El mayor temor es verse sustituíos por máquinas que trabajarán todos las 24 horas los siete días de la semana, y para más inri, sin recibir nada a cambio. Ante tales competencias se hace muy difícil competir.
De hecho, tal y como se habló en la última reunión de Foro Económico Mundial, los robots ocuparán en 50% de los puestos actuales. Se destruirán, por lo tanto, cerca de 75 millones de puestos de trabajos. Por el contrario, se requerirán 133 millones de empleos nuevos que atiendan a la implementación de la robotización.
La disrupción de la automatización industrial afectará, sobre todo, a personas con empleos de bajo nivel y consecuentemente, de menos retribución económica. Lo que se dibuja así es que el nuevo empleo requerirá trabajadores con una formación competente y por lo tanto, con un salario más elevado.
Automatización y la robótica industrial, dos conceptos casi desconocidos
A pesar de que cada vez más se habla de ambos conceptos en la esfera pública, los ciudadanos no acaban de comprender de qué se tratan. Gran parte de ello se trata a que la robotización de la industria se está desarrollando a pasos de gigante.
Qué se entiende por automatización
Para hablar de automatización y maquinaria inteligente debemos hablar sobre el proceso de dotar a un aparato de inteligencia artificial para que lleve a cabo una tarea por si mismo. Durante este proceso no se requiere la competencia de una persona que controle si la tarea se realiza correctamente.
Cabe decir que este proceso de automatización ya se conocía. Los antiguos autómatas eran prototipos que tenían la voluntad de aparentar y moverse con un ser animado. La diferencia es que no estaban capacitados para realizar acciones por ellos mismos.
De qué se trata la robotización industrial
Actualmente se estudia y se investiga cómo llevar a cabo procesos industriales de manera automática. Es lo que se conoce como Industria 4.0.
La estandarización ISO 8373:1994,I. define a los robots industriales de la siguiente manera: “un manipulador que se puede programar en tres o más ejes multipropósito, controlado automáticamente y reprogramable”.
Lo cierto es que las grandes empresas empiezan a ver con buenos ojos la automatización en la industria. Ven una buena oportunidad para convertir sus cadenas de producción mucho más eficientes. Si se automatiza el trabajo en cadena, aburrido y monótono, los trabajadores podrían dedicarse a otras cosas más importantes.
Variedades de automatización
Existen varios modelos de automatización industrial. Depende de la clase de trabajo que deba desempeñar en la cadena de producción.
Para trabajo repetitivo
Para este tipo de trabajo, que consiste en llevar a cabo la misma acción, es muy recomendable que la automatización esté diseñada para desempeñar siempre la misma acción, llamada automatización fija. Por otro lado, la inversión que cuesta este tipo de robot es más elevada, ya que se trata de una automatización muy concreta.
Para trabajo intermitente
La fabricación de un producto puede supone procesos de trabajo diferentes. Para ello, se necesita un robot que realice la misma acción durante un tipo y después sea capaz de realizar otra acción para seguir con la producción de dicho producto. Para ello, la programación programable es la mejor solución. 
La programación programable consiste en reprogramar al robot para que realice cierta acción hasta terminarla. Una vez acabada, se vuelve a reprogramar para que realice otra acción. Y así con cada producto.
Por estaciones de trabajo
Hace ya dos años que viene desarrollándose. Este tipo de automatización combina programación fija y programable para trabajar por estaciones.
Cada estación se conecta entre si pero cada una trabaja por libre. Esto es así para que una sola máquina pueda fabricar varios objetos al mismo tiempo. Todo ello controlado desde un ordenador, que supervisa al robot en tiempo real.
Tal y como podemos deducir tras leer este artículo, las empresas que sepan adaptarse a estos nuevos procesos automatizados podrán ser más competitivas en la llamada cuarta revolución industrial.
