Aunque parezca mentira, las condiciones laborales de las futbolistas de la primera división femenina aún no están reguladas. Las jugadoras, hasta ahora, no han disfrutado de un convenio colectivo que fije, por ejemplo, el salario mínimo. De hecho, hasta hace muy poco tiempo eran habituales las cláusulas antiembarazo, que son totalmente ilegales. Ante una situación tan precaria, la Asociación de Futbolistas Españoles, la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino y la Real Federación Española de Fútbol hace meses que negocian el primer convenio del sector. El acuerdo se cerrará en una reunión el próximo 4 de octubre.
Pero, ¿qué piden exactamente las futbolistas? Las deportistas plantean cuestiones como la conciliación familiar, las vacaciones remuneradas, los derechos de imagen, la incapacidad laboral o la disponibilidad de un fisioterapeuta. A día de hoy, los hombres tienen garantizados todos estos derechos. En cambio, las jugadoras tienen que negociar cada contrato con los directores deportivos por su cuenta. Sea como sea, el objetivo no es que las mujeres cobren lo mismo que los hombres, porque el fútbol femenino no mueve tanto dinero como el masculino. La idea es que todas las jugadoras de Primera División disfruten de las mismas condiciones. En otras palabras, que esquiven las prácticas abusivas y la incertidumbre que hasta ahora ha reinado en el deporte femenino.
El punto más conflictivo es el salario base, los porque clubes pequeños no disponen de suficiente presupuesto. De todas formas, se prevé que con los patrocinios y las ayudas de la liga de primera división masculina se pueda cubrir. En Emagister aplaudimos la existencia de este convenio. Quién sabe: quizás en poco tiempo veremos como las jugadoras tienen la repercusión social y mediática que se merecen.
¿Qué nos enseña el primer convenio colectivo en el fútbol femenino español?
- El fútbol femenino, en auge. Es una buena noticia que las asociaciones de fútbol femenino se pongan de acuerdo para regular los derechos laborales de las jugadoras. Las futbolistas tienen cada vez más visibilidad para reivindicar su trabajo. Así pues, es probable que en el futuro más mujeres se animen a practicar deporte profesionalmente.
- Los salarios, la gran asignatura pendiente. A pesar de los avances que acabamos de comentar, el fútbol femenino no logra tener la misma repercusión que el masculino en los medios de comunicación. Esto incide directamente en los sueldos de las jugadoras. En este sentido, conviene que los periodistas hagan un esfuerzo por cubrir también los partidos de fútbol femenino. Solo así se conseguirá generar más interés entre los aficionados.
- El convenio, un arma contra las retiradas precoces. Son muchas las futbolistas que llegan a Primera División a edades tempranas (por ejemplo, a los 16 años). Sin embargo, la tasa de abandono antes de los 30 es muy alta. ¿Por qué? Pues porque la mayoría ven poco futuro profesional en el mundo del fútbol y deciden priorizar la carrera académica o cambiar de vida. Seguramente, el convenio aportará mayor estabilidad y motivación entre las interesadas.
