Es posible que este término te suene o que hayas hablado de la función de estos profesionales en el mercado laboral, ¿pero sabes exactamente cuáles son sus tareas?.
Pues bien, como te mostramos en este artículo, un personal shopper es un asesor de imagen que, además, se encarga de elegir y comprar las piezas de vestuario para sus clientes y asesorarlos en todo lo referente a su apariencia, desde el corte de pelo hasta el color de las uñas. Para ello, se requiere una formación específica y conocimientos integrales de moda, estilismo, protocolo y nuevas tendencias.
¿Qué puedes estudiar para ejercer como personal shopper?
Si esta es una profesión que te interesa porque sientes pasión por la moda y la imagen personal, una buena opción es el curso de Personal Shopper en Comercio, pues aprenderás a ofrecer una atención de calidad, potenciar la imagen de tus clientes; combinar piezas de ropa, accesorios, colores, texturas, estilos; diferencias las diferentes tendencias masculinas y femeninas, y adecuar el estilismo de acuerdo al tipo de evento.
Junto a estos conocimientos técnicos, también aprenderás sobre los diferentes tipos de silueta corporal y cómo sacar el mayor provecho a cada una, a través de piezas de ropa que realcen las cualidades y disimulen los “fallos”. Con toda esta información asimilada, otra de las tareas de un personal shopper es organizar las compras de manera inteligente, coincidiendo con cada temporada, pensando en los diferentes tipos de eventos a los que su cliente deberá asistir, y maximizar su armario para asistir a todos luciendo impecable. Fascinante, ¿no?
¿Dónde puede trabar un personal shopper?
- Empresas dedicadas al estilismo comercial, artístico o personal.
- Productoras de televisión y cine.
- Empresas de comunicación que requieran profesionales de moda para atender a sus clientes.
- Hoteles de lujo que ofrezcan este servicio a sus clientes.
- Empresas que buscan homogenizar la imagen de sus empleados y garantizar que siempre den su mejor cara ante los clientes.
¿Cómo pinta el futuro para los personal shopper?
La figura de personal shopper apareció a mediados de los años 80 en Nueva York, y durante las últimas tres décadas se ha extendido por todo el mundo. Su auge se debe en gran parte a la necesidad de los consumidores de optimizar su tiempo libre. Contar con un personal shopper que se ocupe de la apariencia y la planificación de atuendos evita tener que invertir tiempo y energía en buscar por cuenta propia.
Esto no parece que vaya a cambiar, así que el futuro luce prometedor para los personal shopper que se formen con dedicación, que sean disciplinados y que aprendan a usar el networking a su favor.
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