La figura del abogado es la más conocida en el ámbito del Derecho, pero la realidad es que este campo profesional aglutina muchos otros perfiles. Por ejemplo, el de procurador. Este especialista es, de hecho, uno de los profesionales clave como veremos más adelante a la hora de hacer frente a un procedimiento judicial. Acompáñanos a conocer todas las características de los procuradores.
DEFINICIÓN:
¿Qué es un Procurador?
Un procurador es aquel profesional licenciado en Derecho que ejerce como representante de aquellos particulares o empresas que deben comparecer ante un tribunal. Es, en este sentido, una figura esencial en todo procedimiento judicial. A diferencia de un abogado, el procurador no realiza la defensa de ninguna de las partes, sino que sus labores son puramente de representación ante un juez.
El procurador ejerce un rol más que indispensable, pues es obligatorio en todo juicio. Hay alguna que otra excepción. Por ejemplo, cuando la cantidad a reclamar sea inferior a 2.000 euros. Entonces, no será precisa la presencia de un procurador. La figura de este profesional, así como sus obligaciones, está regulada en el Real Decreto 1281/2002.
FUNCIONES:
¿Qué hace un Procurador?
Para comprender mejor el papel crucial que realizan los procuradores, vamos a desglosar sus funciones más importantes. Como hemos señalado, su misión es representar a los litigantes, pero ¿cómo se materializa esa representación?
- Informa al abogado y cliente del estado del procedimiento judicial.
- Se encarga de los diferentes trámites: notificaciones, aplazamientos, etc.
- Presenta los escritos que redactan los abogados.
- Se informa y traslada al abogado la fecha de las vistas y otros detalles de importancia.
- Defiende los intereses de sus representados.
- Tiene el deber de representar a los litigantes que carecen de recursos económicos.
- Gestiona el pago de las tasas judiciales.
FORMACIÓN:
¿Qué estudiar para ser Procurador?
Para ser procurador es obligatorio contar con el título de Grado en Derecho. Afortunadamente esta es una carrera disponible en prácticamente todas las universidades españolas privadas y públicas. En función de tus necesidades, puedes cursarla tanto de manera presencial como a distancia. Ambas modalidades son igual de válidas y tienen una duración de cuatro años. Sin embargo, estudiar la carrera universitaria de Derecho es solo la primera parte del camino para trabajar de procurador.
Para ejercer esta profesión, es indispensable realizar un Máster de Acceso a la Procura. Esta formación te brindará los conocimientos y capacidades que necesitas para desarrollarte en esta área profesional. Por último, deberás superar una prueba de aptitud.
PERFIL:
¿Qué competencias y habilidades debe tener un Procurador?
Acabamos de ver la formación requerida para trabajar como procurador. En este camino de aprendizaje, irás descubriendo las habilidades que necesitas para acceder a esta rama profesional. Son las siguientes:
- Capacidad resolutiva
- Conocimiento de la legislación
- Atención al detalle
- Habilidades en informática jurídica
- Interés por la resolución de conflictos
- Excelentes dotes comunicativas
- Trabajo en equipo
- Iniciativa
- Honestidad y transparencia
SALIDAS PROFESIONALES:
¿Dónde trabaja un Procurador?
Los procuradores son el nexo entre la Justicia y el ciudadano, de ahí que su jornada laboral transcurra mayoritariamente en las sedes judiciales. Pueden ejercer sus funciones en cualquier ámbito del Derecho: civil, laboral, administrativo y penal. Aunque es una pieza fundamental en buena parte de los procedimientos judiciales, la realidad es que en cada una de estas ramas hay excepciones y no siempre se exigirá el trabajo de estos profesionales.
Es habitual que los procuradores trabajen por cuenta propia, esto es, que ejerzan como profesionales independientes. En este caso, su papel estará regulado por el Estatuto de Autónomos o bien por la Mutualidad de Procuradores.
Por último, pueden trabajar en turno de oficio, es decir, en el área de la Asistencia Jurídica Gratuita, de modo que sus honorarios correrán por cuenta de la Administración.
EMPLEABILIDAD:
¿Hay empleo? ¿Cuál es el salario medio de un Procurador?
En la actualidad, la carrera universitaria de Derecho es una de las más demandadas, lo que quiere decir que cada año hay un buen número de estos profesionales en la búsqueda de oportunidades laborales. La fuerte competencia, entonces, podría dificultar el acceso a un trabajo, especialmente cuando se carece de mucha experiencia. La buena noticia, en todo caso, es que para ser procurador se requiere una formación específica y complementaria al Grado en Derecho, lo que actúa de importante filtro.
En lo que respecta al salario medio de un procurador en España, estaría situado en unos 1.100 euros mensuales para quienes no cuentan con demasiada experiencia. Aquellos procuradores de larga trayectoria podrían superar perfectamente los 2.000 euros mensuales.
FAQs:
Preguntas frecuentes sobre la profesión de Procurador
Para trabajar como procurador, lo primero sería cursar la carrera de Derecho. Al estar en posesión del título universitario, entonces, sería requisito estudiar un Máster de Acceso a la Procura. Hay otros cursos igualmente válidos que habilitarán para trabajar como procurador, pero es conveniente que te asegures de que están certificados por el Consejo General de la Abogacía. Generalmente, este tipo de másteres incluye un periodo de prácticas obligatorias. Tras completar esta formación y las prácticas, deberás superar una prueba de capacitación del Ministerio de Justicia. Por lo general, hay convocatorias todos los años. Por último, es obligatorio registrarse en el Colegio de Procuradores.
El Máster de Acceso a la Procura suele contemplar tres semestres, por lo que podría alargarse hasta el año y medio. Otros másteres y postgrados vinculados con los estudios de la procuraduría tendrán una duración muy similar.
La tecnología y los idiomas (especialmente el inglés) son dos herramientas que debe saber manejar todo procurador. En cuanto a la primera, es preciso que sepa utilizar ciertos programas informáticos para el acceso a la información y la gestión de trámites. Respecto al inglés, es necesario entender la terminología jurídica del mundo anglosajón de cara a la resolución de conflictos en un escenario transfronterizo.
