La Programación Neurolingüística o PNL es una metodología que se basa en cómo funcionan nuestros procesos internos, mentales y emocionales, así como en la influencia del lenguaje en la programación mental y las demás funciones del sistema nervioso. Es decir, busca respuesta a la relación existente entre nuestros comportamientos y experiencias. Mediante la PNL podemos reprogramar la mente usando el lenguaje, que se encarga de codificar la experiencia percibida por el sistema neurológico, con el fin de conseguir resultados favorables en nuestras acciones. ¿Quieres saber cómo funciona? Te lo contamos todo en esta entrada.
¿Qué principios tiene la PNL?
Este método ayuda a mejorar la comunicación con el entorno y uno mismo. Por ello, sirve para superar limitaciones que nos ponemos, ganar confianza consigo mismo, cambiar hábitos, mejorar las relaciones con los demás, y poder generar, así, estados internos positivos. A continuación veremos cuáles son los principios fundamentales que sigue la programación neurolingüística:
Un mapa interior único
El mapa interior de una persona determina su orientación en el mundo que le rodea. Este mapa es simple en edades tempranas pero, a medida que se crece, se convierte en algo más complejo, con caminos nuevos. De esta manera, se va creando y ramificando conforme a las experiencias que vivimos, por lo que nunca hay dos mapas iguales entre personas.
Comportamientos positivos
Es uno de los principios que más debate genera. Se refiere a que cada persona y su comportamiento tienen una intención positiva. La PNL pretende redirigir dicha intención hacia una conducta más adaptativa y adecuada para la persona.
Experiencias con estructura propia
Todos nuestros pensamientos, sentimientos y experiencias tienen una estructura formada por un conjunto de elementos. Así, cualquier cambio en su composición hará que también se modifique su efecto.
Problemas con solución
Hay problemas que no tienen solución, pero los que sí la tienen están relacionados con el mapa interior del que hemos hablado antes. Cuantos menos caminos tenga un mapa, menos soluciones podremos dar a una situación concreta. Por ello, un mapa interno con más recursos asimilará los problemas con menos gravedad.
Todos tenemos la fuerza necesaria
Este principio está relacionado con la confianza en uno mismo. Cada persona cuenta con la fuerza necesaria para conseguir sus metas. En cambio, cuando nos falta confianza, surgen los problemas.
Cuerpo y mente forman parte del mismo sistema
Las personas son cuerpo y mente. Por este motivo, las emociones o sentimientos afectan al cuerpo. El efecto también se produce al contrario, es decir, el cuerpo tiene efectos sobre la mente.
La comunicación depende del resultado
Se refiere a delimitar pautas claras de comunicación para evitar malos entendidos entre los interlocutores.
Oportunidades, no fracasos
Debemos ver nuestra vida como un conjunto de caminos que nos lleven a conseguir nuestro objetivo, por lo que los fracasos deben ser oportunidades para mejorar y avanzar.
Si no funciona, intenta más cosas
Tenemos que insistir en ayudar y modificar los comportamientos que no sean eficaces. Si no cambias tu manera de actuar cuando algo sale mal, las consecuencias serán siempre negativas.
