No siempre pensamos en la importante labor que un cardiólogo lleva a cabo y lo indispensable que es para nuestras vidas. Sin embargo, si alguna vez has tenido un problema del corazón, es probable que le tengas un gran aprecio a esta profesión. Las enfermedades cardiovasculares son una de las principales causas de muerte en el mundo, además de ser la primera causa de muerte en España. Dentro de estas, la que más ha aumentado en muertes en la última década es la hipertensión, debido al gran estrés que nos rodea en nuestro día a día.
Según los expertos la mejor manera de luchar contra estas enfermedades es la prevención de estas, y es por esto que la tarea de un cardiólogo es de suma importancia. En este artículo te contaremos en detalle en qué consiste el trabajo de un cardiólogo, qué formación es necesaria para convertirse en uno, qué esperar del mercado actual y te presentaremos los mejores cursos que tienes a tu disposición.
DEFINICIÓN:
¿Qué es la cardiología?
La cardiología es una rama de la medicina que se encarga de las enfermedades del corazón así como algunas partes del sistema circulatorio, siendo su finalidad el estudio, la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las patologías cardiovasculares. Se les llama cardiólogos a los doctores que se especializan en este área de estudio de la medicina interna. Pero un cardiólogo solo puede tratar a pacientes adultos, siendo los cardiólogos pediátricos los que se ocupan de los niños. La cardiología no es quirúrgica, ya que de esto se encarga la cirugía cardiovascular. Además, dentro de la cardiología se encuentran varias especializaciones.
FUNCIONES:
¿Qué hace un Cardiólogo?
Un cardiólogo se enfrenta a nueve tipos diferentes de enfermedades del corazón al tratar a sus pacientes. A continuación, te contamos las tareas que este profesional lleva a cabo a la hora de atender pacientes y prevenir o tratar estas enfermedades en ellos:
- Obtener la historia clínica de los pacientes.
- Advertir a los pacientes sobre las posibilidades y los riesgos de una enfermedad.
- Aconsejar a los pacientes sobre cómo cuidar la salud cardiovascular, asesorando sobre la dieta y estilos de vida saludables.
- Evaluar la salud de los pacientes mediante un examen físico completo.
- Pedir estudios para conocer más sobre su estado, como electrocardiogramas, análisis de sangre, radiografías y biopsias.
- Identificar problemas y diagnosticar.
- Manejar y registrar la información clínica.
- Explicar síntomas y tratamientos con los pacientes.
- Prescribir tratamientos.
- Detener y controlar enfermedades de riesgo cardiovascular.
- Documentar el historial y mejoramiento de los pacientes.
- Realizar estudios de imágenes.
- Derivar a los pacientes a un cirujano cardiovascular si el problema requiere cirugía.
- Realizar la historia epidemiológica.
- Mantener una correcta relación con los enfermos y su entorno.
- Colaborar con otros médicos especialistas.
FORMACIÓN:
¿Qué estudiar para ser Cardiólogo?
La formación profesional de un cardiólogo comienza estudiando y completando la carrera de medicina, que tiene una duración de seis años. Luego se debe realizar el MIR en la especialidad de cardiología, y es durante este tiempo que el estudiante de cardiología aprende a realizar las tareas mencionadas en la sección anterior.
Una vez acabados los estudios es muy importante que un cardiólogo continúe formándose a través de másteres, postgrados y cursos para profundizar el conocimiento sobre la cardiología. De esta forma, el profesional se mantiene actualizado sobre las nuevas técnicas y tecnologías que surgen todos los días, algo esencial para ofrecerles los mejores tratamientos a sus pacientes.
PERFIL:
¿Qué competencias y habilidades debe tener un Cardiólogo?
Ser cardiólogo no es para nada fácil, y no solo importan la formación y la motivación para convertirse en uno, sino también contar con las siguientes habilidades clave:
- Capacidad para actuar bajo presión.
- Buena atención y comprensión.
- Buen razonamiento.
- Destreza manual.
- Organización.
- Responsabilidad.
- Confianza en sí mismo.
- Versatilidad.
- Capacidad para visualizar.
- Humanidad.
- Dignidad.
- Resistencia física.
SALIDAS PROFESIONALES:
¿Dónde trabaja un Cardiólogo?
Por lo general, un cardiólogo trabaja en una oficina fuera de un hospital, pero están conectados contractualmente a uno cercano. Sin embargo, también hay cardiólogos que tienen oficinas dentro de hospitales.
También, un cardiólogo tiene la opción de trabajar como docente o educador, tanto en universidades como en otras instituciones.
EMPLEABILIDAD:
¿Hay empleo? ¿Cuál es el salario medio de un Cardiólogo?
Definitivamente sí hay empleo para un cardiólogo, ya que la demanda para su labor siempre existirá. El salario medio para un médico de esta especialización es 63.800 euros brutos anuales. Sin embargo, como en muchas profesiones, la experiencia, la formación, el horario y el lugar donde se ejerce tienen una gran influencia en la determinación del salario.
FAQs:
Preguntas frecuentes sobre la profesión de Cardiólogo
En primer lugar, hay que tener muy claro que convertirse en cardiólogo es un proceso largo que dura alrededor de 10 años. Esto significa que se trata de un proceso formativo largo y complejo que requiere de mucho esfuerzo y determinación.
Como ocurre con cualquier otra carrera, es indispensable analizar nuestras motivaciones y si realmente existe vocación. De lo contrario, difícilmente podremos disfrutar del camino y ejercer la profesión con pasión.
Teniendo todo esto claro, llega el momento de decidir dónde queremos estudiar: si en un centro público o en uno privado. En el primer caso, el único requisito con el que debemos cumplir para poder entrar al Grado en Medicina en una universidad pública es culminar exitosamente el Bachillerato y presentarnos a la EBAU (Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad).
Para obtener una plaza y formalizar la matrícula, la nota media de ambos estudios debe ser igual o superior a la nota de corte publicada por la universidad. En cualquier caso, las notas de corte suelen ser orientativas, ya que poder realizar la preinscripción dependerá de la demanda de alumnos y de sus notas medias. Siempre se priorizará a los estudiantes con mejores expedientes académicos.
Supongamos que lo hemos logrado y que finalmente hemos obtenido el título de médico. ¿Qué toca ahora? Pues bien, el segundo gran paso es especializarse y para ello es necesario realizar el examen MIR (Médico Interno Residente). Se trata de una prueba de 185 preguntas de respuesta múltiple sobre medicina.
El examen se debe contestar en un máximo de 4 horas. La nota obtenida junto con la valoración del baremo o expediente académico permite clasificar en orden decreciente de puntuación a todos los médicos presentados. Quienes obtengan los puntajes más altos podrán elegir tanto la especialidad como el hospital donde la realizarán.
Es imprescindible obtener el Grado en Medicina y luego optar por la especialización en cardiología.
Un médico en cardiología se forma académicamente durante unos 10 años divididos así: 6 años de universidad cursando el Grado en Medicina y 4 años de especialidad MIR en un hospital.
Después de estos 10 años, es posible elegir realizar otros cursos para mantenerse al día o para subespecializarse.
La serie de enfermedades cardiovasculares tratadas por los cardiólogos son muchas, pero las más comunes son la hipertensión arterial (presión alta), la enfermedad coronaria (infartos), las arritmias cardíacas (palpitaciones) y la insuficiencia cardíaca (fatiga intensa).
Los cardiólogos intervencionistas tienen capacitación adicional que les permite realizar «intervenciones», lo que significa que pueden insertar stents, realizar angioplastias y otros procedimientos similares.
Si la información que te hemos dado sobre el profesional de la cardiología te ha generado un interés en convertirte en uno, seguramente querrás profundizar más en ello. No dudes en comenzar a formarte ahora y darte la oportunidad de alcanzar tus objetivos profesionales.