Medicina es una de las profesiones más duras y exigentes, tanto por los años de preparación como por el papel que juega en el conjunto de la sociedad. Después de superar los años de estudio, muchos médicos optan por realizar una especialización para centrarse en una rama concreta de la medicina.
Sin embargo, la especialidad de la medicina interna abarca un campo muy amplio y se centra en atender multitud de patologías y en coordinarse con el resto de especialistas en caso de que fuera necesario un tratamiento específico.
Por ello, los médicos internistas son una figura fundamental en los hospitales y centros de salud para la atención de todos aquellos pacientes que presentan enfermedades que no necesitan ser tratadas quirúrgicamente.
Si estás interesado en especializarse en esta rama de la medicina, puedes consultar nuestra guía básica para resolver cualquier duda relacionada con esta profesión.
DEFINICIÓN:
¿Qué es un Médico Internista?
Un médico internista es aquel profesional de la medicina que se encarga de los problemas de salud de una persona adulta. Poseen una visión global de las diferentes patologías que pueden afectar al cuerpo humano y se encargan de su prevención y tratamiento, siempre que no precisen tratamiento quirúrgico.
Por tanto, un médico internista no es un médico general, pues estos no se forman en ninguna especialidad, ni tampoco un interno, que son aquellos médicos que están cursando el MIR en un hospital.
FUNCIONES:
¿Qué hace un Médico Internista?
Los médicos internistas son fundamentales para la asistencia sanitaria hospitalaria de un adulto (persona mayor de 14 años). Por ello, en su rutina diaria realizan multitud de tareas, puesto que atienden pacientes y son el enlace con otros médicos especialistas.
- Atención integral de los problemas de salud de los pacientes
- Guía al enfermo en su visita al hospital y dirige los protocolos de actuación
- Coordinación con otros médicos para solicitar tratamientos específicos
- Atención de enfermos con problemas complejos o diagnósticos poco evidentes
- Atención hospitalaria, junto a los profesionales de Atención Primaria, de pacientes crónicos con varias enfermedades
- Revisiones periódicas y seguimiento de los pacientes
- Asistencia a personas adultas con patologías como diabetes, insuficiencia cardíaca, etc.
FORMACIÓN:
¿Qué estudiar para ser Médico Internista?
Para especializarse en medicina interna se debe estudiar el Grado de Medicina, que implica un total de 6 años (360 créditos). Posteriormente, se debe superar el examen de Médico Interno Residente, más conocido como MIR (cuatro años).
Por último, hay que estudiar el Sistema de Formación Específica en Medicina Interna en un hospital acreditado por el Ministerio de Sanidad, lo que supone otros cuatro años de formación.
Así pues, para llegar a ser médico internista deben pasar un mínimo de catorce años, siempre que se superen todas las pruebas en el plazo de tiempo estimado para ello.
PERFIL:
¿Qué competencias y habilidades debe tener un Médico Internista?
Los especialistas en medicina interna contraen una serie de responsabilidades con todos sus pacientes y el conjunto de la sociedad, por lo que durante su formación deben adquirir una serie de actitudes y valores.
- Mostrar respeto y empatía con las personas enfermas
- Saber trabajar en equipo y coordinarse con otros especialistas
- Capacidad de adaptación a cualquier situación
- Ofrecer información sincera y detallada a los pacientes
- Ofrecer la mejor atención científico-técnica posible
- Honestidad para buscar la seguridad del paciente en todo momento
- Humildad para reconocer las propias limitaciones
- Capacidad y voluntad de mejora constante para actualizar conocimientos
SALIDAS PROFESIONALES:
¿Dónde trabaja un Médico Internista?
En la mayor parte de los casos los médicos internistas trabajan tanto en hospitales (público y privados) como en centros de atención primaria, donde pasan consulta a los pacientes y los derivan a otros especialistas si fuera necesario.
EMPLEABILIDAD:
¿Hay empleo? ¿Cuál es el salario medio de un Médico Internista?
El salario bruto anual en España ronda los 50.000 €, una cifra muy inferior a otros países europeos como Francia, Bélgica o Alemania.
FAQs:
Preguntas frecuentes sobre la profesión de Médico Internista
Es imprescindible obtener el Grado en Medicina y luego optar por la especialización en medicina interna.
Un médico internista se forma académicamente durante unos 10 años divididos así: 6 años de universidad cursando el Grado en Medicina y 4 años de especialidad MIR en un hospital.
Después de estos 10 años, es posible elegir realizar otros cursos para mantenerse al día o para subespecializarse.
Un médico general es aquel que no ha realizado ninguna especialidad, es decir, que superó la carrera o grado de Medicina y el MIR. Además, atiende a pacientes de todas las edades.
Por su parte, el internista se especializa en medicina interna tras superar el MIR y solo atiende a personas adultas.
Este curso tiene el objetivo de formar con conocimientos científicos y comunicativos a los médicos para prepararlos en la atención a los pacientes, con una duración mínima de cuatro años.
Consiste en una serie de periodos de rotación de diferente duración en los cuales se adquieren diferentes destrezas técnicas y se aprende a tratar todo tipo de patologías. Es fundamental, además, adquirir una serie de habilidades comunicativas para lidiar con los pacientes y con todo tipo de situaciones.
Los médicos internistas cuentan con un gran conocimiento científico gracias a los años de formación que deben superar para especializarse en esta rama de la medicina.
Así pues, los especialistas en medicina interna tratan multitud de patologías, puesto que están capacitados para diagnosticar un tratamiento eficaz que solucione los problemas de salud de las personas adultas. Las enfermedades que atienden con mayor frecuencia son las siguientes:
1. Nefrología: prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades del riñón.
2. Cardiología: se encarga de estudiar y tratar cualquier patología que afecte al corazón o al sistema circulatorio.
3. Neumología: se ocupa de diagnosticar y remediar cualquier enfermedad que afecte a los pulmones.
4. Endocrinología: en este caso, se encarga del tratamiento de cualquier enfermedad que afecta al sistema endocrino, es decir, a las hormonas.
Así pues, un médico interno tiene amplios conocimientos sobre cualquier patología que afecte a las personas adultas. En el caso de que la situación lo requiera, pueden derivar a los pacientes a un especialista en el área que corresponda para un tratamiento más a fondo de la enfermedad.
