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¿Cuál es el rol de un community manager?

El desarrollo de nuevas plataformas ha fomentando el surgimiento de diversas figuras que, poco a poco, tienen mayor relevancia. En ese sentido, las redes sociales tienen un valor importante y, por tanto, quienes las administran también se presentan como figuras esenciales dentro de las organizaciones, la estrategia de una marca o, incluso, el perfil personal de una figura. Todo esto comenzó en 2008 y el nombre que reciben esas personas que administran perfiles y establecen líneas guías de trabajo es “Community Manager” o, simplemente, “CM”. Desde entonces, su crecimiento es sostenido. En el siguiente artículo se profundizará sobre aspectos clave de este trabajo, desde lo más básico hasta otros aspectos más complejos.

Community manager: ¿qué hace?

Un community manager es responsable de gestionar y administrar la comunicación de una empresa a través de los canales de internet que esta tenga. Se encarga de evaluar y desarrollar su imagen dentro de las diversas plataformas de la red. Esta figura pertenece al departamento de Marketing y se encarga de canales como:

– Instagram

– Facebook

– Twitter

– LinkedIn

– YouTube

Cada plataforma le exige cuestiones distintas porque le acerca a públicos diferentes.

Su trabajo consiste en las siguientes acciones:

Elaborar contenido

Aunque parezca una cuestión sencilla, no lo es: debe ser contenido de calidad, que pueda ser explotado en distintos formatos, como la fotografía, los vídeos, la fotografía, entre otros. El objetivo de este material es atraer el interés de la comunidad a la que quiere llegar. Así será mucho más sencillo aumentar las interacciones y propiciar que el público empatice con cuanto se comparte.

Explorar nuevas tendencias

El universo de las redes sociales y del marketing está en constante cambio. Esto reclama al community manager una constante búsqueda de nuevas maneras de comunicar, una evaluación frecuente del tipo de contenidos que se están manejando así como los cambios y la evolución de su público. De esa manera será mucho más sencillo que la presencia en redes sociales y la construcción de imagen crezca de manera positiva.

Diálogo constante con la comunidad

El community manager es la voz de la compañía o marca en las redes sociales. Por tanto, debe saber dar respuestas, a través de comentarios o publicaciones que inviten a la conversación. Aunque esto pueda parece ajeno a la organización, no lo es: estos comentarios son una oportunidad para difundir los valores de la compañía, para que esa comunidad se sienta valorada por la empresa.

Elaborar estrategias

Al community manager se le exige sostener un nivel de interacciones durante los meses. Esto lo logra a través de distintas estrategias orientadas a generar conversación a través de sus distintos canales. Son acciones orientadas a propiciar la participación de los usuarios, a través de sorteos, concursos, retos y otras dinámicas.

Presentar informes de seguimiento

El crecimiento o no de la imagen de la compañía o marca debe quedar soportado. Este recurso le permite al CM poder conocer si su trabajo está dando frutos, explorar nuevas tendencias, saber qué tipo de recursos funcionan en uno u otro canal, conocer cómo puede mejorar y llegar a más gente, a través de métricas que reflejan el estado de acciones tomadas durante un período de tiempo específico.

Tener conocimiento de la audiencia

Para comunicar de manera eficiente hay que saber a quien va dirigido el mensaje. El community manager debe ser consciente de esto y explorar las distintas características de la comunidad con la que interactúa, de su audiencia. De esa manera será mucho más sencillo que pueda establecer vínculos, fomentar el crecimiento del espacio y mejorar la identidad de marca. Guarda relación con el punto anterior porque permite establecer estrategias específicas. El community manager debe “leer” el tipo de usuarios con los que tiene contacto.

Gestionar crisis

En muchas oportunidades, el trabajo del community manager se ve relacionado con aspectos que, quizá, no dependen de su figura. Por ejemplo, si una aerolínea tiene problemas en la entrega de boletos, esto no depende del CM. Sin embargo, sí depende de su rol ofrecer una respuesta clara ante ese inconveniente para evitar mayores inconvenientes.

Community manager: ¿Cuáles habilidades debe tener?

Cada profesión responde a algunas características que, cuando se tienen, facilitan el desenvolvimiento en el área. En el caso del community manager se trata de las siguientes cualidades:

Saber comunicar

No es sencillo y cada audiencia reclama lenguajes distintos, códigos específicos. Pero, más allá de esto, consiste en tener buena redacción, cuidar la ortografía, y saber expresar esos valores que se asocian con la compañía o marca a la que se representa.

Empatía

Es necesario ponerse en los zapatos del otro para lograr conectar. De esa manera será mucho más sencillo alcanzar una relación sólida con la comunidad a la que van dirigidos los mensajes. Estar atento a sus preocupaciones y ofrecer respuestas rápido son clave en este sentido.

Organización

Debe reflejarse en el calendario de Social Media. Se recomienda marcar publicaciones, plazos de entrega y publicación de contenidos, así como de posibles reuniones: es válido confiar en la memoria pero, mejor aún, apoyarse en el papel para soportar esas ideas.

Creatividad

Esta virtud puede hacer la diferencia entre un community manager y otro. En esencia, es el recurso que le permite encontrar una perspectiva que antes no haya sido abordada o darle, por ejemplo, un toque de humor inesperado a determinados contenidos. Se trata de encontrar maneras originales e innovadoras de llegar a los otros.

Interés

Aunque pueda parecer una obviedad, es necesario sumergirse en este universo y estar en constante exploración. De esa manera se podrán reconocer tendencias, nuevas formas de comunicar, cambios en las comunidades, entre otros aspectos que facilitarán la tarea del community manager.

Paciencia

Es la aliada clave y la que, en ocasiones, le da sentido al resto. El trabajo diario puede ser desgastante y, en ocasiones, el usuario no tiene en cuenta que, del otro lado de la pantalla, también hay una persona. La paciencia ayudará a lidiar con comentarios negativos, actitudes cuestionables y facilitará la búsqueda de soluciones.

Redes Sociales y profesiones: cuál es la relación

En ocasiones, el trabajo de un community manager se resume o asocia solo con una marca o perfil específico. Sin embargo, no queda ahí: hay una amplia variedad de campos en los que también tiene cabida.

Social media Manager

Es común que la gente confunda al Social Media Manager con el Community Manager. Tiene sentido porque comparten algunas funciones. Sin embargo, hay una diferencia importante: el Social Media Manager es responsable de pensar y elaborar estrategias que el community manager debe seguir.

Content Manager

Es el responsable de crear los contenidos que se publicarán en las redes Sociales de la compañía. De él depende buena parte de la estrategia de contenidos de una marca. Entre las cualidades que se le exigen están el interés por su audiencia y la creatividad aplicada a contenidos que le permitan diferenciarse de otros.

Social Media Analyst

El análisis es su principal virtud. Esta persona no solo debe prestar atención a likes, reacciones o el número de seguidores que tenga un perfil. Su perfil le exige revisar todas las métricas vinculadas con la comunicación digital para conocer cómo está relacionando su comunidad, cuáles oportunidades puede haber, cómo puede mejorar algún aspecto específico, entre otras cuestiones.

¿Qué hay que estudiar para ser un Community Manager?

Los profesionales que se dedican a esta profesión provienen de la publicidad, la comunicación, el marketing, la comunicación audiovisual o las letras, por lo general. Sin embargo, en la actualidad es un área que está en constante expansión y en la que se necesitan múltiples conocimientos.

Si se trata de encontrar una capacitación específica para ser community manager, se sugiere cursar el Grado Superior en Marketing y Publicidad para sumar todas las herramientas teóricas y prácticas y poder avanzar dentro de este universo, bien sea de forma personal o particular o formando parte de un departamento de marketing.

Este profesión, si bien reclama una dosis importante de tiempo, también tiene distintas aristas que enriquecen el perfil profesional de las personas vinculadas con la publicidad. Durante la práctica se ponen en uso distintas estrategias y recursos que se ven reflejados en otros campos del marketing. Por eso suele ser una experiencia clave en varios sentidos, permitiéndole a las personas poder tener contacto directo con comunidades y formas de pensar distintas y que, a su vez, puede integrar dentro de su plan y visión de acciones y marca.

A esto se suma, para quienes estén interesados en nuevas experiencias, la posibilidad de aprender sobre distintos ámbitos ajenos a la publicidad.

Para más información sobre los programas de estudios relaciones, se recomienda visitar los siguientes enlaces:

  • Ciclo Formativo de Grado Superior en Marketing y Publicidad en Madrid
  • Ciclo Formativo de Grado Superior en Marketing y Publicidad en Barcelona
  • Ciclo Formativo de Grado Superior en Marketing y Publicidad Online

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