Es común encontrar personas que describen a sus mascotas como parte de su familia, en especial si se trata de perros. Están presentes en su día a día y ellos, de alguna u otra forma, dedican parte de su tiempo a cuidarla y atenderla.
Muchas veces, debido a otros compromisos, el cuidado no puede ser total o su educación no puede ser completa. Parte de esa rutina se altera y es necesario apoyarse en personas que sí disponen de más tiempo, como los entrenadores de perros, quienes además son especialistas en estas cuestiones.
Ellos cuentan con las habilidades necesarias para el manejo y adiestramiento canino, un oficio que cada vez tiene más realce dentro de distintas comunidades y que se basa en un aspecto clave: generar confianza entre la mascota y su amo.
Todo esto se puede aprender e, incluso, en la actualidad se cuenta con capacitaciones orientadas específicamente hacia este campo. Una de ellas es el Máster en Adiestramiento Canino, a través de la cual se suman los conocimientos y las herramientas necesarias para crecer dentro de este campo y ofrecer un servicio adecuado.
¿Cuáles son los objetivos del adiestramiento canino?
La psicología canina se basa en dos aspectos, la autoridad y la claridad. Estas cuestiones determinan cualquier proceso de adoctrinamiento orientado hacia determinados objetivos. Cada uno de ellos se sustentará en la obediencia, la capacidad que desarrolla en la mascota para que acate las órdenes que recibe.
Si bien muchas veces el adoctrinamiento suele producirse cuando la mascota ya es adulta, en muchas oportunidades lo ideal es que sea cuando aún es un cachorro. Sin embargo, si se sabe llevar de buena manera, cualquier perro aprenderá con la guía adecuada de un entrenador canino.
En esta etapa, es importante que el dueño de la mascota establezca con el preparador los objetivos que desea lograr. Esto funciona como hoja de ruta para el preparador y, a su vez, evita posibles inconvenientes o malentendidos.
Con base en esto, el trabajo del preparador de perros se basa en los siguientes principios.
Establecer hábitos de higiene
Los perros, como los humanos, también aprenden a controlar sus esfínteres. Sin embargo, no cuentan con la capacidad de distinguir dónde depositar sus excreciones. Es entonces cuando interviene el preparador, quien le enseñará cómo reconocerlas.
Manejar los estímulos ambientales
Esta es una capacidad que se desarrolla, principalmente, en los perros guía. El objetivo de esto es que puedan manejarse con tranquilidad en espacios donde haya un volumen de gente alto, desde restaurantes hasta campos de fútbol o áreas de circulación pública.
Socialización
Hay mascotas que experimentan dificultades para relacionarse con otras. Quizá son muy agresivas o, por el contrario, muy temerosas. El entrenador de perros ajusta estas conductas para que la mascota pueda integrarse mejor tanto a sus pares como a los espacios en los que esté en contacto con humanos.
El proceso de aprendizaje
Hay que tener en cuenta que, como todo proceso, el adoctrinamiento de mascotas también es progresivo. Para ello es necesario cubrir algunas etapas y así, poco a poco, construir las conductas que se desea.
Las principales etapas de aprendizaje son:
- Generalización de las conductas aprendidas. Este proceso consiste en adiestrar al animal en un entorno que le resulte cómodo y evaluar si el aprendizaje se sostiene en el tiempo y en otros espacios.
- Sumar distracciones. De manera progresiva, el entrenador irá introduciendo distracciones para evaluar si responde de la misma manera que cuando no están presentes.
- Mayor distancia. El entrenador irá separándose poco a poco de la mascota al momento de marcar las instrucciones. El objetivo es aportar independencia sin que esto implique la pérdida de control.
- Incremento del tiempo de atención. A través de la enseñanza se incentivan momentos de concentración en la mascota, de los que se le libera para que se relaje a través de frases o expresiones como “Ale, ya” o con una palmada. El objetivo es que esos momentos se puedan sostener en el tiempo de manera sencilla.
- Valoración de órdenes. Se irán compaginando instrucciones concretas con otras un poco más blandas para que la mascota aprenda a distinguirlas.
¿Qué técnicas emplea el preparador de mascotas?
Dentro de los principales valores con los que debe contar un preparador de mascotas están la voluntad, la paciencia y la laboriosidad. Estos principios se acompañan con una serie de técnicas que fortalecen todo el proceso de enseñanza y el aprendizaje de la mascota.
Refuerzo positivo
Es posible que esto suene familiar, tanto para entrenadores como para dueños. Consiste en reconocer el esfuerzo de la mascota a través de un premio cuando haga las cosas bien; desde una galleta hasta un juguete. El objetivo es que esto sirva como premio por su conducta positiva. Este tipo de conductas debe sostenerse en el tiempo para que tengan un efecto real.
Método espejo
Como muchas personas, los perros también aprenden a través de la observación. Si se le rodea constantemente de alguna mascota que ya haya sido adiestrada, poco a poco irá sumando conocimientos, adoptando los comportamientos que reconozca en la otra. Si este proceso se acompaña de la presencia del amo, mucho mejor debido a la conexión emocional, se simplifica el proceso de aprendizaje.
Entrenamiento con clicker
Se considera como una variante del refuerzo positivo. Se realiza con un dispositivo que emite un sonido. Se usa cuando el perro ha hecho una acción o responde a las órdenes que se le asignan, para reconocerlo. Sin embargo, cuando se trata de eliminar o frenar comportamientos indebidos, los especialistas no ven con buenos ojos este método.
Los principios básicos de la psicología canina
Para construir una relación sólida y adecuada, con conductas positivas en la mascota, es necesario comprender su psicología.
- El amo para el perro es su principal relación social. Estas conductas se reflejan en otros espacios. Entonces, como se relacione con el dueño se desenvolverá en otros ambientes. Se trata de ofrecer cariño y atención sin llegar a ser invasivos.
- Es necesario que la mascota socialice cuanto antes. Uno de los momentos ideales es luego de una vacunación, cuando se puede juntar con otros perros y exponer a otros espacios.
- Es importante conocer el pasado de la mascota. Si tuvo algún momento complicado, seguramente lo recreará en alguna oportunidad. Ser consciente de esto facilitará el manejo de la situación.
Como se muestra, si bien el adiestramiento de mascotas depende esencialmente de un preparador, el amo también tiene un papel importante en el proceso. Lo ideal es que ambos puedan trabajar en conjunto para alcanzar los objetivos que se hayan propuesto.
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