Hoy en día la profesión de entrenador personal es altamente demandada, en su mayoría por personas que escogen este camino profesional de forma vocacional ya que es un trabajo en el que se necesita poner pasión.
La competencia es muy alta y variada, por lo tanto, contar con una formación acorde, supone un punto inicial de diferenciación. No es lo mismo recurrir a una persona que posee una certificación (ya sea un curso de Entrenador Personal o una carrera) y años que le avalen, que hacerlo a una persona que no tiene unas bases y conocimientos, ya que, con toda seguridad, no va a poder ayudarte de la misma manera.
Además de la formación, si quieres ser un entrenador personal profesional, estos son los pilares fundamentales que debes poseer:
- Ser buen comunicador y a su vez aprender a escuchar; un cliente si se siente escuchado, se siente valorado.
- Implícate en su vida. Los grandes profesionales aseguran que es fundamental estudiar la vida del cliente, sus gustos, sus hábitos y sobre todo sus fortalezas y debilidades. De aquí sacarás gran parte de la información que te guiará para dar un buen servicio al cliente, ya lo necesite para un momento puntual en su vida o para acompañarle de manera permanente durante la misma.
Una vez que controlas estos aspectos, has de saber motivarle para que no abandone (incluso en los momentos de mayor dureza). Si un cliente está dispuesto a contarte sus debilidades, sus inquietudes etc. es porque has proyectado en él esa confianza, que es la clave para que un buen entrenamiento tenga los mejores resultados. - Un verdadero personal trainer es una persona que vive su profesión con pasión y es lo que transmite en cada una de las sesiones que ofrece.
Es imprescindible divulgar tus conocimientos de forma que tus clientes te crean y que además estén seguros de que eres lo que necesitan para cumplir sus objetivos.
- Personalización: cada persona es única, por eso, como profesionales debemos adaptarnos y asesorar según cada perfil personal. Tenemos que estar muy atentos tanto a su lenguaje verbal como al no verbal ya que a veces, “un gesto vale más que mil palabras”. Es un error esperar reacciones y resultados idénticos entre dos personas distintas que realizan el mismo entrenamiento.
- Un último valor añadido que puede poseer un entrenador personal es la paciencia. Debes ser paciente para que tus clientes sepan que con paciencia y continuidad podrán conseguir su meta.
Un personal trainer es un profesional que se encarga de ayudar y orientar a las personas para que consigan sus objetivos deportivos. Su labor se realiza principalmente en los gimnasios (hoy en día casi todos cuentan con un entrenador personal que asesore a sus clientes), sin embargo, cada vez son más los que ofrecen sus servicios como freelance, a domicilio. Estos servicios suelen ser demandados muchas veces por personas con menor fuerza de voluntad o por profesionales de élite que precisan este tipo de servicios por ser muy personales, individuales y muy profesionales.
La Federación Española de Entrenadores Personales y Fitness (FEEPYF) está compuesta por grandes profesionales en este sector.
La FEEPYF tiene el verdadero objetivo de agrupar, defender y asesorar a los profesionales formados. Además en su código ético figura: ser un buen profesional, mantener presente los estándares de práctica profesional, conocimientos de primeros auxilios, principio del no daño y de bondad, estar activo, prudente, cuidadoso y preparado, mantener una imagen profesional, conocer el estado global de salud del cliente, respeto por el cliente y compañeros, responsabilidad civil y sinceridad. Son unos valores importantísimos, ahora tú también puedes formarte y unirte a esta gran comunidad ¡Anímate!
