¿Sabes lo que es la hidroterapia? Se basa en el uso de agua con fines terapéuticos para prevenir y tratar diferentes tipos de enfermedades musculares. Por ello, los balnearios y centros de salud utilizan el medio acuático para favorecer la relajación y brindar tratamientos para diferentes patologías. Si quieres saber más sobre el impacto del agua en la mejora de la salud, síguenos y te daremos más explicaciones. También puedes conocer más sobre este tema en nuestro Postgrado en Técnicas Hidrotermales, ¡ven a verlo!
Técnicas usadas en la hidroterapia
La hidroterapia es un tratamiento que utiliza agua para relajar y fortalecer las articulaciones, aliviar posibles dolores y promover el movimiento corporal. Este efecto se logra a través de los estímulos térmicos que se generan en el medio acuático (como los cambios de temperatura bruscos entre frío y calor, y la presión mecánica de cada extremidad.
Este es un tratamiento generalmente indicado como preparación o recuperación del cuerpo, especialmente cuando se han sufrido lesiones y afecciones de cualquier tipo. Estamos hablando de un tratamiento que se remonta a tiempos de los griegos, que ya en su época usaban las propiedades del agua con fines médicos y espirituales. Desde entonces, los tratamientos con agua para aliviar tensiones, se han ido adaptando a los nuevos tiempos hasta llegar a ser lo que son hoy en día.
¿Para quiénes está indicada?
Las técnicas de hidroterapia se suelen realizar de forma personalizada para cubrir las necesidades físicas y patológicas de cada persona. Los tratamientos se suelen realizar en spas, saunas, piscinas y jacuzzis. Generalmente, la terapia hidrotermal se recomienda para pacientes que padecen las siguientes patologías relacionadas principalmente con el sistema motor:
- Fibromialgia
- Artritis
- Esclerosis múltiple
- Cambios de equilibrio, postura y coordinación
- Atrofia muscular
- Dolor en la espalda, cintura y cuello
- Ciática
- Fracturas
- Esguinces
- Dislocación
- Hernia
- Osteoporosis
Sin embargo, se deben considerar algunas contraindicaciones para la terapia acuática. Además, no se recomienda utilizar este método cuando se sufren infecciones a causa de diabetes avanzada, afecciones cardiacas, incontinencia o infecciones de la piel.
¿Qué beneficios ofrece?
- Activar la circulación sanguínea
- Estimula el sistema inmunológico
- Proporciona un gran alivio muscular
- Alivie el estrés, la ansiedad y otros trastornos emocionales
- Promueve la relajación mental
- Incrementa el tono muscular
- Mejora el rango de movimiento del cuerpo.
- Reduce significativamente las contracturas musculares
- Ayuda a respirar correctamente
¿Cuántos tipos de hidroterapia hay?
Como se muestra a continuación, existen diferentes tipos de terapias acuáticas según las necesidades de cada paciente.
Terapia acuática térmica
Se alterna la temperatura del agua para el tratamiento. Por ejemplo, debido a su efecto sedante, se puede utilizar agua caliente para favorecer la relajación y aliviar dolores leves (efecto analgésico). Por su lado, el agua fría o tibia estimula la circulación y tiene un efecto antiinflamatorio más fuerte.
Hidroterapia mecánica
En este caso, se pueden distinguir cuatro tipos:
Empuje: ayuda a desarrollar los músculos.
Presión: se aplica agua a través de un eyector para estimular el sistema nervioso.
Compresión: mejora la circulación sanguínea.
Resistencia hidrodinámica: fortalecer los músculos.
Técnicas químicas hidrotermales
Cloración: Activa funciones orgánicas.
Sulfato: en la piel, es beneficioso para los sistemas respiratorio y motor.
Ácido sulfúrico: trata enfermedades articulares y respiratorias.
Ferruginosa: se puede utilizar como tratamiento complementario para las enfermedades de la piel y de la sangre (como la anemia).
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