El arte de soldar tiene muchos siglos de historia a cuestas, es posible afirmar que milenios. Y es que sin importar los avances tecnológicos, el manejo de máquinas de soldar es uno de esos oficios que nunca pasa de moda por ser siempre necesarios.
El proceso de unir dos cuerpos metálicos sometiéndolos a altas temperaturas, ha sido documentado por algunos arqueólogos como una actividad hecha por primera vez en la India alrededor del año 310 a. C., aunque también hay registros de su uso en el Imperio Romano. No fue sino hasta la segunda mitad del siglo XIX cuando, en Inglaterra, se oficializó la técnica de la soldadura por fusión con electricidad, un antecesor de lo que son los soldadores modernos.
La soldadura es una destreza técnica que, para muchos, ofrece una salida profesional, pero también es una habilidad muy útil para resolver pequeños trabajos domésticos o como simple entretenimiento. En todos los casos, es recomendable el uso de accesorios protectores como máscaras protectoras, guantes o cascos para evitar daños y heridas durante la soldadura.
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Tipos de máquinas de soldar que hay en el mercado
El mercado actual ofrece diferentes tipos de máquinas de soldar, cada una con funcionalidades distintas. Empecemos:
Soldadura de arco
Es una de las más conocidas. Las máquinas para soldadura de arco usan energía eléctrica para lograr la fundición de los metales mediante la aplicación de calor. Este tipo de soldadura puede resultar peligrosa, por lo que requiere un alto nivel de preparación para su manejo.
Están compuestas por una varilla metálica con un arco en uno de sus extremos, conocida como electrodo. Tiene un grosor que oscila entre 1.6 y 2.5 milímetros, por lo que su mal uso puede provocar graves quemaduras.
Dentro de las soldadoras de arco, encontramos varias subcategorías de máquinas de arco:
- Máquina de soldadura manual de arco metálico, para soldar piezas mediante electrodos de acero.
- Máquina de soldadura de gas de arco metálico, para soldar piezas usando gases inertes como el nitrógeno.
- Máquina de soldadura de arco de núcleo fundente, que funciona con un electrodo que produce un gas de blindaje.
- Máquina de soldadura de arco de gas de Tungsteno, cuyo electrodo está hecho de est
e material. - Máquinas SAW o de soldadura de arco sumergido, cuya principal característica es que utilizan un material granulado como medida de protección para el arco. Este material granulado puede ser óxido de calcio, óxido de manganeso o fluoruro de calcio.
Soldadura de estaño
Este tipo de máquina consigue soldar mediante la fundición de estaño. Usan energía eléctrica para generar calor, que aplican a través de una punta de metal. La soldadura de estaño es muy útil para la reparación de aparatos pequeños y es muy usada dentro del campo de la electrónica.
Es posible encontrar en el mercado diferentes tipos de soldadores de estaño, dependiendo de la potencia (varían entre los 12 y los 22V). El más común es el soldador de resistencia, formado por una punta de cobre y un mango aislado. También es posible encontrar el soldador instantáneo, cuya principal característica es su forma de pistola. Es igualmente útil para reparar objetos pequeños.
Soldaduras de gas
Son aquellas que tienen un soplete que se alimenta de gas almacenado en un recipiente parecido a una botella. Estas máquinas de soldar son muy comunes en el ámbito de la fontanería, pues son muy efectivas para unir metales simples como el aluminio o el cobre.
Soldaduras de láser
Se trata de máquinas capaces de soldar mediante la aplicación de una capa de calor producida por un láser. Son muy útiles para soldar objetos muy pequeños o para trabajar en espacios reducidos.
Soldaduras Inverter
Se trata de los soldadores más avanzados, con un tamaño cómodo y un peso ligero que facilitan su transporte. Se diferencian de los soldadores tradicionales por su duración y la gama de soldaduras que permite, mucho más amplia que la que ofrece la competencia. Los soldadores Inverter también registran una inversión energética menor frente al resto, por lo que en ocasiones también es conocida como “soldadura digital”.
Una profesión eterna
En un momento en que las cifras de paro nacional sobrepasan el 14%, saber manejar máquinas de soldar puede suponer una fuente de ingresos el día de mañana.
Se trata de un oficio cuya demanda nunca termina, sobre todo en sectores como el industrial, la electrónica, la construcción o algunas áreas de montaje y desmontaje de unidades. También es necesario en el sector del automóvil, la industria eléctrica, el sector metalúrgico y en la industria aeronáutica, así como el en el sector tecnológico. El sueldo medio de un soldador en España está entre los 18.000 y los 20.000 euros.
Dominar el oficio de la soldadura también es útil en algunas ramas del arte, como en la escultura contemporánea. Entre muchos ejemplos, podemos señalar el de la artista rusa Alexandra Ivleva, cuya obra se ha desarrollado mediante la soldadura de metales. Como ves, siempre hay formas de encontrarle fines laborales, artísticos o aficionados al arte de soldar.
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