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¿No haces vacaciones en verano? Aquí tienes 5 consejos para sobrevivir

verano sin vacaciones

Aunque el verano es el periodo de las vacaciones académicas, el mundo laboral no siempre da la oportunidad de descansar durante esta época del año. Sin embargo, hay muchas personas que procuran situar sus días libres en julio y agosto para conciliar la vida familiar con el empleo.

El hecho de que el verano sea el momento preferido para desconectar, dificulta un poco las cosas a los que no tienen la opción de tomarse un respiro. Sobretodo en el aspecto psicólogico, ya que a menudo se da por supuesto que todo el mundo está de vacaciones. Además, el aumento de las temperaturas intensifica las sensaciones de cansancio y pesadez. En este post, te presentamos 5 consejos para sobrevivir a un verano sin vacaciones. ¡Toma nota!

5 tips para sobrevivir a un verano sin vacaciones

  1. Valora la tranquilidad en el trabajo. De acuerdo, que la mayoría de tus compañeros hagan vacaciones y tú no no es la situación ideal. Sin embargo, trabajar cuando más vacía está la oficina tiene sus ventajas. Por ejemplo, el ambiente suele ser más relajado y silencioso, por lo que la concentración está asegurada. Además, poder afrontar tus tareas sin presión te ayudará a mejorar la productividad.
  2. Haz pequeñas escapadas. Aunque no puedas plantearte unas vacaciones largas, hay otras maneras de desconectar después de unos días intensos de trabajo. En este sentido, planificar una breve escapada de fin de semana es la opción ideal para recargar las pilas. ¡Aprovecha para hacer turismo de proximidad y conocer mejor tu entorno!
  3. Aprovecha para realizar tareas pendientes. Si has conseguido aumentar tu concentración, ha llegado el momento de empezar a tachar actividades pendientes en el trabajo. Intenta dejar el trabajo acumulado a cero: te sentirás mucho mejor una vez lo hayas acabado. Además, también puedes aprovechar para realizar lluvias de ideas o para dedicarte a tareas innovadoras que te motiven.
  4. Apúntate a un curso de verano. ¿Quieres tener la cabeza ocupada más allá del trabajo? Si la respuesta es sí, plantéate compaginar el empleo con la formación breve. Por ejemplo, un curso en la universidad de verano, un MOOC, un intensivo de idiomas, etc. ¡Tú decides qué te apetece más!
  5. Saca el máximo partido a las horas de sol. Por suerte, los días en verano son más largos (o como mínimo, tienen más horas de sol). Así pues, brindan la oportunidad perfecta para que tengas momentos de ocio una vez fuera de la oficina. Reservar un par de horas para pasarlo bien puede ser la solución para no desgastarte psicológicamente. ¡Pruébalo!

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